¿De qué va? Nadie pinta desde cero. Pero al observar las pinturas matéricas de Antoni Tàpies, con sus colores lisos, materiales pobres y la extrema simplicidad de sus símbolos, podríamos llegar a pensar que el artista lo consiguió. En sus obras más famosas, Tàpies nos invita al silencio y a la contemplación, para que aprendamos a mirar con más profundidad en un mundo saturado de imágenes. Ahora, el museo se pregunta: ¿cuál era el imaginario de Tàpies cuando empezó a pintar?
¿Por qué hay que ir?
Para sumergirte en el entorno visual del artista a través de medio centenar de obras y más de un centenar de objetos y documentos de distintas naturalezas. Después de un año de celebración por el centenario de Tàpies, esta exposición nos invita a redescubrirlo desde nuevas perspectivas, cuestionando los relatos más hegemónicos sobre su trayectoria.