La Cova Fumada en la calle Baluard es un fenómeno que supera el ámbito gastronómico. Este restaurante popular de la Barceloneta no ha salido de la propiedad de la familia de Solé desde el año 1944, cuando abrió. Hoy está al frente Josep María Solé, y hasta hace poco no era extraño ver a la abuela Palmira pelando ajos y patatas en la entrada. Aquí no hay reservas que valgan: la gente, locales y guiris, hace cola y codos a partir de las doce en sus míticos portales de madera, para pillar un sitio. En su origen, era una taberna de pescadores a la que acudía la gente a beber –se traían su comida– y por los años 50, con la moda, empezaron a servir tapas calientes. Sed conscientes: en este sitio y unos pocos más está el origen de la tapa en Barcelona y los mejores desayunos de cuchillo y tenedor.
En el barrio de La Barceloneta se concentra todo lo que podría resumir la esencia de Barcelona: el olor a mar, la proximidad entre vecinos que proporcionan las calles estrechas, algunos de los mejores bares de la ciudad y la sencillez de lo bueno: una caña bien tirada, un plato de calamares frescos y crujientes, y poco más. Esto es el ideal, claro, pero sabemos que hoy en día lo que parece tan sencillo por escrito, a veces cuesta mucho encontrar. En nuestra lista verás bodegas históricas y bares de tapas. Si después de pasar por unas cuantas barras te apetece mesa y mantel, échale un vistazo a nuestra selección de los mejores restaurantes del barrio.
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