. En un momento de la Barcelona real, era la primera etapa de los noctámbulos antes de despedir la noche en Bocaccio. "Todavía se deja ver Oriol Regàs" (el creador de Bocaccio), nos relata el Sr. Alfonso. Si en el pasado las glorias pasaban a tomar su jerez con jamón, hoy Gabino Diego o Javier Bardem, cada vez que vienen a Barcelona, visitan a Alfonsito. "Lola Flores venía, se sentaba a esperar Manolo Caracol y hacía que leía el periódico, porque no sabía leer y lo cogía del revés", recuerda el Sr. Alfonso... También se sentaron sobre sus mimbres Paco Rabal, Mario Cabré, Manolete o la Bella Dorita.
Se puede comer bien desde un bocadillo, hasta ‘capipota’, tartar de escalivada con anchoas del Cantábrico, pasando por carnes y pescados salvajes a la brasa, pies de cerdo, atún fresco a la plancha o parrillada con chorizo criollo, morcilla y asado de tira entre otros. Todo sin parar, cada día, hasta la una de la madrugada.
¿Sois de esos estresados que sólo comen cuando el trabajo os lo permite? Mal. O al contrario: sois unos anarquistas de salón que no dejáis que la convencionalidad de los horarios y las comidas os corten el rollo. O sois de esos noctámbulos que salís a cenar a las once. Sea como sea, en Barcelona existen buenos restaurantes de cocina sin interrupciones, donde podréis comer sin mirar el reloj.