Elegimos nuestras piscinas favoritas para darnos un chapuzón y refrescarnos este verano
Cuando el calor se pone a hacer de las suyas, un buen chapuzón siempre es un plan ganador para combatir las altas temperaturas. Por eso, para que no te pille sin saber a dónde ir, te animamos a echar mano de esta lista y hacer un periplo por las mejores piscinas de Madrid y de la región. Más allá de las municipales, seleccionamos para ti algunas de nuestras favoritas, entre las que no faltan azoteas de hoteles, piscinas públicas, de universidades, naturales...
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¿Qué es? Este hotel, en plena Gran Vía, cuenta en su azotea (1.200 metros cuadrados de terraza) con una de las piscinas de Madrid más apetecibles. Grande, señorial y con vistazas.
¿Por qué nos gusta? Porque parece mentira que uno pueda darse un chapuzón con esa tranquilidad y esa calma mientras, abajo, la ciudad sigue con su ritmo frenético habitual.
Cuándo abre: la terraza, durante todo el año. El beach club y la piscina, en verano.
¿Qué es? Es un Centro deportivo municipal Vicente del Bosque situado en la zona norte de Madrid. Entre sus instalaciones cuenta con un campo de fútbol, pistas de baloncesto, pádel, tenis y vóley-playa, entre otras, y piscinas tanto de verano como cubiertas.
¿Por qué nos gusta? Ha estado cerrado por reformas un tiempo y está previsto que reabra, por fin, este mes de junio. Nos encanta porque en verano desde su piscina hay unas vistas espectaculares a las Cuatro Torres. Además, las piscinas son grandes y tiene zona ajardinada con sombra.
¿Qué es? Es un hotel de lujo situado en pleno barrio de Salamanca, en la calle Velázquez. Además de su espectacular interior, ofrece una amplia propuesta de ocio y gastronomía, incluso para quienes no están alojados. En su interior se encuentra Slvaje, una de las propuestas de la capital para disfrutar de los famosos restaurantes espectáculo. También tienen un club clandestino y en la azotea siempre hay plan tanto en invierno como en verano.
¿Por qué nos gusta? Porque en el rooftop Picos Pardos vas a encontrar con el buen tiempo un oasis de camas balinesas y una pequeña piscina que se convierte en el lugar perfecto para refugiarse del calor de la ciudad.
¿Qué es? Conocida también como la Piscina de Lago, tiene una piscina de 36x25 metros y otra de 33x16 metros, además de una infantil.
¿Por qué nos gusta? Rodeadas de una zona ajardinada y con un amplio espacio, estas piscinas de Madrid son una buena alternativa para disfrutar en verano. Los fines de semana, eso sí, se pone imposible.
¿Qué es? Un espacio de 300.000 metros cuadrados donde, entre otras cosas, encontrarás diferentes piscinas. Ojo, porque entre todos los vasos suman más de 7.200 metros cuadrados. Ahí es nada.
¿Por qué nos gusta? Porque además de las diferentes opciones de piscinas en Madrid, este espacio cuenta con instalaciones en las que practicar otro tipo de deportes: pádel, tenis, rugby, vóley…
¿Qué es? Este espacio fue construido para acoger los Mundiales de Natación de 1986 y se le considera el templo de la natación madrileña.
¿Por qué nos gusta? Porque su zona exterior tiene una piscina olímpica para nado libre y, además, dos vasos destinados al público infantil.
¿Qué es? La piscina de esta universidad es una de las más demandadas en verano, no solo por los dos enormes vasos que incluye, sino porque está rodeada de una zona de árboles y césped a tan solo unos metros de Moncloa.
¿Por qué nos gusta? Por su ubicación, muy cerca del centro, pero lo suficientemente lejos para encontrar algo de calma. Eso sí, entre semana. Los fines de semana está muy cotizada.
¿Qué es? La piscina pública de verano más céntrica de toda la ciudad y una de las más cotizadas. O, mejor dicho, dos, dado que el complejo cuenta con una piscina olímpica de 50 metros de largo y otra infantil para los más pequeños.
¿Por qué nos gusta? Además de que sus instalaciones son impecables, su ubicación nos viene de lujo para dar esquinazo al calor en cualquier momento.
¿Qué es? Espacio para la práctica de deporte en Madrid que cuenta con piscinas al aire libre y que, además, están rodeadas de un área verde donde esconderse a la sombra cuando el sol calienta demasiado.
¿Por qué nos gusta? Por su zona de pícnic que la convierte en un lugar perfecto para llevarte tu comida y pasar todo un caluroso día de verano.
¿Qué es? Este centro deportivo, situado a pocos metros, del Parque Forestal de Entrevías cuenta con piscinas en Madrid perfectas para el verano.
¿Por qué nos gusta? Aunque no es como estar en plena naturaleza, sí que se respira algo del aire fresco propio de un entorno natural.
¿Qué es? Es una de las piscinas naturales más grandes de España. Está en Buitrago de Lozoya y es un oasis con kiosko de helados, sombrillas de brezo y mesitas de pícnic atestadas de bañistas que comen sandía y emparedados de atún.
¿Por qué nos gusta? La longitud de la piscina, que se extiende por la orilla del río y que está rodeada por una zona ajardinada muy próxima a un pinar donde también cobijarse bajo una gustosa sombra.
¿Qué es? Piscina de agua salada en la localidad de Parla, donde, además, el entorno acompaña a base de extensiones de arena y abundante césped.
¿Por qué nos gusta? Porque hay algo incomparable, sencillamente único, en la experiencia de bañarse en agua salada y ahora podemos hacerlo sin tener que ir hasta la playa.
¿Qué es? Las Presillas de Rascafría son una de las zonas naturales situadas en el Valle del Paular. Son tres piscinas naturales que se forman en el cauce del río Lozoya y en torno a las cuales se ha creado un área recreativa en la que es posible pasar el día disfrutando del sol y de un agradable pícnic.
¿Por qué nos gustan? Porque aunque son naturales, tienen todas las comodidades de una piscina de verano convencional, con aparcamiento (de pago), aseos y bar. Eso sí, son muy populares.
¿Qué es? Son unas piscinas situadas en el Parque Recreativo de Las Berceas, en Cercedilla. Originalmente, nacieron el transcurso del Arroyo de la Venta y eran naturales, pero actualmente están tratadas con cloro.
¿Por qué nos gustan? Porque están situadas en un entorno idílico, rodeadas de naturaleza y también gozan de espacio con merenderos, bar y aseos. La entrada es de pago.
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