Seguro que habéis escuchado más de una vez que en Barcelona hay gente muy guapa. No sabemos si se refieren a belleza interior o exterior, pero lo que tenemos claro es que en la ciudad hay más de un sex symbol al que no le haríamos un feo. ¡Aquí tenéis 10!
Ahora ya no busca al Jacq’s del anuncio sino que aparece en series, pero nos da igual, aquella cremallera que bajaba se ha quedado guardada en el imaginario colectivo. Advertencia: ponerse un traje de moto tan estrecho y brillante como aquel sólo puede hacerlo la Van Campen. No lo prueben en sus casas.
Lucía tableta de chocolate en la serie ‘Plats bruts’ en el papel de David. La risita ridícula que gastaba el personaje acababa enfriando, pero si miras los capítulos en silencio, el efecto sexy dura más. El inconveniente es que te perderás unos guiones memorables. No se puede tener todo.
Ella sí que lo tiene todo: cuerpo de vértigo, voz nasal sensual, habilidad encima del escenario, sin duda inteligencia, novio famoso y, por encima de todo, canta en catalán con buen acento. Es nuestro sex symbol por excelencia, mejor no la podrían haber fabricado.
No queremos que todo sean cantantes o modelos, así que aquí tenemos a una jugadora de básquet que es la sex symbol de un grupo de jovencitos que no la dejan ni a sol ni a sombra. Encima, tiene el sexy indepe, ya que se nacionalizó eslovena porque no la dejaban jugar en la selección catalana.
Los catalanes hemos hecho un sacrificio colectivo (uno más) enviando a nuestro político más sexy a Europa para mezclarse con los verdes. Esperamos que de comisario no pierda esta 'à la sans raison' que gasta y que siga con una coherencia izquierdista que le va la mar de bien.
Podríamos poner muchas actrices porque, sobre todo en el caso de las mujeres, parece casi obligado que sean sexys. Nos gusta su languidez provocativa, pero aquí también podríamos incluir a Sílvia Bel, Ariadna Gil, Clàudia Bassols, Mariona Ribas... vamos sobrados de guapas.
Es Lleó en la serie ‘Polseres vermelles’. Allí está en silla de ruedas, pero las adolescentes del país saben que, a pesar de que le hayan amputado una pierna, el chico es muy sexy porque tiene fuerza de carácter y una mirada que te funde, cosa que dice mucho a favor de nuestras chicas.
Aquí no estamos para sutilezas. La periodista lo tiene todo para ser una sex symbol: es rubia y luce escotes espectaculares. Ahora solo le falta hacer un programa deportivo, buscarse un futbolista muy rico y dar el salto hacia la felicidad. Parece que se resiste.
El cocinero del Àbac hace de jurado en MasterChef y casi que uno querría que le juzgara cada noche las tortillas de patata en casa. Salió en la portada de una revista masculina luciendo un cuerpo que normalmente uno no se imagina que tenga un cocinero. ¡Sí, chef!
Es el sex symbol barcelonés más emblemático que hemos reunido en este top. No sabemos en qué debía pensar el arquitecto Jean Nouvel a la hora de erigir este tótem de cristales de colores, ya que parece que lleve el preservativo incorporado. Pero pronto la Sagrada Família le hará la competencia.
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