En estas fechas el obrador de Beatriz Echeverría se llena de roscones (igual que las cinco tiendas que tiene repartidas por la ciudad). Y este año sus piezas esconden una sorpresa especial creada por Grapat, la firma de juguetes de madera sostenible. Ah, y la caja ha sido diseñada por el ilustrador Carlos Buendía. Su roscón de Reyes es único en Madrid porque, entre otras cosas, se cuece en molde dentro del horno y eso le otorga una forma (algunos lo llaman roscottone) y una textura diferente a todos los demás. Esta técnica permite que la masa crezca en vertical y desarrolle una miga tierna, suave y aromática. En los ingredientes no hay cambios. Siempre materia prima de calidad contrastada sea la mantequilla o el agua de azahar y productos eco como los huevos o los cítricos.
Son el broche gastronómico que pone fin a la Navidad. O lo eran. Ahora, aún siendo muy estacionales, se empiezan a ver y a comer antes de que lleguen las primeras comidas familiares. A modo de cata selectiva, dicen. Sea como sea, lo que cada vez se vuelve más necesario, si no los quieres acabar comprando en el Lidl o Mercadona o haciéndolos en casa con la Thermomix, es reservarlos, encargarlos con antelación. Cada año se elabora un roscón gigante y gratis con un fin solidario pero ¿dónde comprar el mejor roscón de Madrid estas navidades? Pues en estos pequeños obradores artesanales que os recomendamos a continuación entre los que además tenéis también algún roscón sin gluten. La decisión de con o sin relleno o el tamaño ya es cosa vuestra.
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