Aprovecha la ocasión para probar los combinados de Tanqueray, una ginebra equilibrada con cuatro botánicos: enebro, cilantro, angélica y regaliz.
Este bar restaurante ubicado en Pinto cuenta con una espaciosa terraza que se llena cada verano. Es un rincón perfecto para quedar a tomar unas cañas con los amigos los fines de semana o refrescarse después de un duro entrenamiento en las instalaciones deportivas junto a las que está situado. En invierno también se puede disfrutar de su terraza, ya que se encuentra acristalada, en un ambiente rodeado de espacios verdes del Parque Gabriel Martín. Perfecto también para cenas en grupo.
Con una fachada de ladrillo visto, un gran arco sobre la puerta de entrada y rejas sobre las ventanas. Este bar de Getafe imita, como indica su nombre, a un auténtico monasterio. También en su interior se respira ese aire medieval, con muros anchos y grandes adoquines. El único toque de modernidad son las imágenes que cuelgan de sus paredes a modo de exposición. Es uno de los locales más conocidos de la zona para ir a tomar unas cañas los fines de semana con unas raciones o tapas.
Reformado recientemente, este bonito restaurante situado junto al Paseo de la Castellana, en la calle Zurbano, es perfecto tanto para una comida formal de trabajo, unas copas de afterwork o una cena íntima el fin de semana. Su decoración es sencilla pero elegante, en tonos cálidos y acogedores. En su carta encontraréis desde jamón de bellota hasta huevos rotos, ensaladas, verduras frescas y carne y pescado de primera calidad. También tienen una carta de picoteo más sencilla por si os apetece pasaros a tomar el aperitivo.
Este café de Móstoles es un local divertido y fresco donde ir a picar algo, a disfrutar de un capricho dulce y donde tomar unas copas con los amigos. Sus batidos son espectaculares y muy originales (tienen uno de Pantera Rosa, el famoso bollo de nuestra infancia) y suelen organizar todo tipo de eventos, desde monólogos hasta noches de copas y fútbol. Si os apetece relajaros de verdad, probad sus sishas. Su terraza exterior, con césped artificial, es una de las más solicitadas de la zona en cuanto llega el verano.
Este exclusivo restaurante, perteneciente al conocido Grupo Oter, se encuentra en una de las zonas más ricas de Madrid. Se trata de una animada marisquería rodeada de vegetación, ideal para probar los mejores productos del mar de primera calidad (y pagar por ellos, claro). El local es luminoso, de decoración sobria y elegante, con originales fotografías de mariscos que invitan a ser degustados. Podéis venir a probar sus diferentes espacios, desde una barra de tapeo hasta su restaurantes o salones privados y por supuesto su bonita terraza de verano.
Pintxos, pizzas, buns, tapas, raciones… está claro que a Morao se viene de picoteo. Y tiene para todos los gustos. Además, podéis pedir lo que más os guste de la carta o probar sus menús, para grupos o mínimo dos personas, que incluye una selección de sus mejores creaciones (salmorejo, croquetas de jamón, pintxo de solomillo con brie y de tortilla con trufa, mini hamburguesas con cheddar, etc.). Su ubicación privilegiada, en pleno Paseo de la Castellana, bajo el edificio Torre Europa, es otra de sus ventajas.
