Ahora ya no sólo vale la pena ponerse a leer bajo la sombra de un árbol. Si traéis el portátil, también podréis navegar por Internet. ¿Desde dónde? Buscad el letrero de la ‘W’ azul y un rincón de césped cercano que os convenza. Disfrutaréis de Barcelona WiFi, un servicio gratuito que ha dispuesto el ayuntamiento en centenares de espacios de la ciudad. Una larga lista y de consulta obligada para aquellos que no quieran gastarse un euro en sus viajes virtuales.
El siglo XXI ha visto nacer una nueva especie de exploradores. Ellos no buscan oro, tierras o conquistas. Quienes llevan el portátil ya incorporado en sus espaldas o los últimos resistentes a pagar el 3G, han hecho del WiFi su tesoro más buscado. Si sois uno de ellos, hoy os ahorramos la expedición.