¿Qué es un gastrobar? Debe cumplir, como mínimo, tres requisitos. En primer lugar, en la puerta no tiene fotografías de los platos. En segundo, hace un horario extensivo y pone atención en todo lo que hace: buenos almuerzos, buenos menús o platos del día, buenas cenas y copas. La tercera exigencia: poner especial atención en los productos de temporada: la única forma de ofrecer buena cocina, en realidad. Estos 6 bares cumplen los tres requisitos, y ¡os aseguramos que comeréis igual o mejor que en casa de vuestra madre!
Lugares como En Aparté nos convencen que Sant Pere será el próximo barrio que será un hervidero. Estamos en un delicioso bar francés que rebosa buen gusto y simpatía: reciclaje al poder y solera de bar granítico en un local que no abrió ayer pero que se conserva como un pequeño secreto del vecindario. Una pizarra anuncia tablas de quesos, embutidos y rillettes y platos del día. Y un menú de mediodía donde nunca faltan especialidades francesas –buey a la borgoñesa o 'quiche'– incluso alguna húngara, por antecedentes familiares. Siempre: almuerzo casero –probad el carmelé, brioche cremoso con vainilla– y volveréis.
Concepción innovadora: Fabián Ríos tiene un bar de cocina argentina en formato tapa. “En mi país no hay nada así”, dice. Compro: su idea es la de un bar de carne en el que las tapas son cortes argentinos en raciones de 100 gramos (a 5 € el platito). Tres colegas y una mesa llena de ojo de bife, matambres y brinza fileteados. Nivel cárnico muy alto: las partes nobles son argentinas y las que no tanto, gallegas y gerundenses. Hay empanadas hechas al momento que marcan la diferencia. Hacer un menú de mediodía en este club luminoso, doce cubiertos bajo un techo altísimo, es balsámico: el diálogo que se establece entre el suco de una buena brinza hecha al punto, el chimichurri y el romesco es antológico. Para comer y cenar.
Discover Time Out original video