En el edificio antiguo de la Universitat de Barcelona está este oasis lleno de plantas con estanque incluido donde los estudiantes y quienes no lo son se refugian del tráfico y el ruido del centro de la ciudad. Con un poco de suerte, encontraréis a algún joven interesante para no tener que relajaros solos.
Aunque la adoremos, Barcelona puede ser caótica y ruidosa. Por eso hemos buscado 10 refugios en los que, a pesar de estar dentro de la ciudad, podemos aislarnos, relajarnos y dejar pasar las horas.