Pollos asados
Shutterstock
Shutterstock

Comer un buen pollo asado en Madrid: la lista definitiva

Pollo y domingo van siempre en la misma frase. Entre lo festivo, el "hoy no quiero cocinar" y lo económico, un plato no falla a la hora de juntarse

Gorka Elorrieta
Publicidad

Da igual el tiempo que pase. Muchas familias (y estudiantes de resaca sin ganas de cocinar) siguen haciendo cola para llevarse un buen pollo asado para comer todos juntos el domingo. Un pollo dorado con salsa y patatas. Es leerlo y salivar. Podéis esperar en la puerta vuestro turno, reservar mesa o pedirlo a domicilio pero no renunciar a este placer, que además está al alcance de todos los bolsillos, cunde mucho y, si sobra, se puede reutilizar en otra receta”. Resulta un plato infalible y reconfortante. Y además no tienes que limpiar el horno después. Popular a más no poder. ¿Cualés son los asadores de pollo imprescindibles? Quizás cada barrio tenga el suyo. Seas más de muslo/alita o de pechuga, no te pierdas estas direcciones. 

RECOMENDADO: Restaurantes y platos para comer rico y barato

1. Zagal 1200

Cuando el pollo asado se convierte en tendencia, a los establecimientos de toda la vida con gente haciendo cola en la calle se suman locales como este (Diego de León, 24) con un aire de refinamiento rural, espacios acogedores que elevan la propuesta culinaria. Al final es pollo al carbón pero aquí importa la experiencia, la atención porque, aunque te lo puedes llevar a casa (o pedirlo sin moverte del sofá), seguramente te apetezca como plan familiar para comer ahí mismo, hoy mismo. El proyecto lo han cuidado desde el origen dos amigos de siempre, Adriana de Zunzunegui y Borja Galobart. ¿Y por qué 1200? Es el peso óptimo para un pollo asado, que aquí se disfruta, acompañado de buenas guarniciones, en dos formatos: entero o medio. Ah, y el espacio cuenta con un pequeño colmado de producto afín.

2. Asador Navarro

En Asador Navarro llevan asando pollos a la manera tradicional desde el año 1981, hace ya más de cuatro décadas. Este negocio familiar, muy próximo a la plaza del General Vara de Rey (centro neurálgico del Rastro los domingos) cuenta con una receta secreta que le ha consolidado como el asador más popular de La Latina: un pollo de exterior crujiente e interior jugoso. No tienen opción de comer allí y tampoco delivery, pero sí puedes hacer tu encargo de pollo asado con antelación y pasar a buscarlo. Entre los complementos al plato principal, no fallan sus pimientos verdes, aunque además cuentan con las clásicas patatas fritas, y otros como croquetas, empanadillas, tortilla de patata… que se ofrecen en combos junto con el plato protagonista. Sus precios, muy contenidos, hacen de este un plan tan delicioso como asequible. ¡Ojo, que puede formarse cola!

Publicidad

3. Pollo y carbón

A poca distancia de la glorieta de Conde Casal, en la calle del Doctor Esquerdo, se encuentra Pollo y carbón, restaurante peruano muy consolidado en el barrio. De apariencia sencilla y con dos plantas, este es su segundo local en Madrid (el primero se encuentra ubicado en el barrio de Fuencarral) y el único de ellos en el centro de la ciudad. Aquí el pollo se elabora a la brasa y se encuentra dentro una carta amplísima dedicada a las elaboraciones populares de la cocina peruana. Puede adquirirse entero, por medios y también por cuartos, acompañado de patatas y/o ensalada.

Abren de lunes a domingo y tienen menú del día. Este asador de pollos, en el mismo local donde antes estuvo Callao24, es uno de los proyectos que el destacado chef peruano Jhosef Arias tiene en Madrid (seguramente Piscomar sea el más conocido). Y de esto los peruanos saben un rato porque viven en el país latinoamericano que más pollo consume (50 kilos por persona al año aproximadamente); de hecho cada tercer domingo de Julio se celebra el Día del Pollo a la Brasa. Se trata un humilde pero suculento restaurante de barrio donde se sirve otro de sus iconos nacionales. Se puede pedir enteros, en medios o cuartos y se acompaña de patatas fritas, ensalada criolla. Puedes elegir entre cuatro salsas para condimentar el pollo: desde una más suave de aceituna botija a una crema picante de rocoto. La casa aprovecha la brasa para hacer varios anticuchos y otras piezas de carne (asado de tira, costillar...). 

Publicidad
  • A la brasa
  • Chamartín

Nueva oda al pollo al carbón. Como en el exitoso Limbo (de Malasaña), la firma de nuevo Javier Brichetto (Piantao). Casi con las campanadas que daban paso al 2021 abría sus puertas el nuevo local del grupo La Musa (siete restaurantes ya en la ciudad), a un paso del Santiago Bernabéu. Muy versátiles y espaciosos 500 metros cuadrados (amplia terraza acristalada incluida) y una marcada estética industrial dibujan el escenario para las recetas a la brasa que gobiernan la carta. Además de la ya ineludible estrella de la casa, acompañada de la muy solicitada patata de feria, este hermano pequeño trae algunas novedades como el springroll de pollo con romesco de avellanas o la milanesa a la pizza de ternera con mozzarella, pimientos al rescoldo, aceitunas y tomate. 

6. Gallino

El prestigioso mercado de la Paz (Ayala, 28) recibe a un nuevo inquilino este 2022. Hablamos de Gallino, un puesto con ese aroma a brasa, a carne ahumado que hace salivar. De su horno al carbón salen los pollos de corral con un crujiente pecaminoso. Y llegan a casa perfectos dentro de su bolsa con zip. Te lo puedes llevar entero pero también sirven medio, alitas, jamoncitos (e incluso una versión al curry o en ensalada César). Eso sí, siempre acompañado por sus patatas caseras de corte fino pero un poco más gruesas que unas chips. Detrás se encuentra el empresario Benjamín Calles, que lo tiene claro: "Intentar ofrecer productos básicos que siempre funcionan. Escoger pollos muy buenos y llevarlos a la temperatura ideal". Van a convertirse en referentes del barrio. 

Publicidad
  • Comer

Todo buen aficionado al pollo asado conoce ya la carta de Piri Piri. O debería. Su receta y su estilo portugués conquistan al primer bocado. Y no solo a los vecinos de Lavapiés donde abrieron el primer local consolidándose desde su inauguración como una referencia dentro y fuera del barrio. Tanto es así que en 2021 levantaron la persiana de su segundo local. Esta vez en Chueca.

8. Hermanos Pollo

No son hermanos pero casi como si lo fueran ya de tantos y tantos años que llevan trabajando codo con codo. El penúltimo proyecto, porque siempre están maquinando algo, de Álvaro Castellanos e Iván Morales es rendir tributo al pollo asado de toda la vida y darle un pequeño giro. En su delivery (aunque también puedes pasarte a recogerlo por su local en Modesto Lafuente, 61) sirven un exquisito pollo de corral pero también un, más pequeño pero igual de jugoso, pollo tomatero. Han organizado un par de menús (para dos y cuatro personas) para que no tengas ni que pensar o te lo puedes armar tú mismo con la importante selección de entrantes y guarniciones que tienen en carta.  

Publicidad

9. Humo Vallecas

Al otro lado de la M30 este restaurante peruano está especializado en elaborar deliciosos pollos a la brasa. Su propuesta se puede disfrutar tanto en su local como para llevar, o en un pedido a domicilio directamente en su web, para que llegue directo a casa. En Humo Vallecas el claim es “del horno a tu mesa” y así lo cumplen, elaborando su plato estrella en un horno de carbón tradicional al estilo de su país de origen. En este caso, el pollo a la brasa puede combinarse con patatas fritas y/o ensalada y comparte carta con otras carnes asadas y platillos de cocina popular y tradicional peruana, que pueden completar tu comanda. 

10. Montarelpollo

El veterano chef Joaquín Felipe, que oficia ahora en el restaurante Atocha 107 (atención a su terraza interior), es quien comanda este proyecto que exprime todas las virtudes del pollo. El producto estrella es su versión asada (pollo ecológico de los campos de Los Monegros) pero también lo tenéis en pepitoria, frito, guisado o en una ración de croquetas, en ensaladilla o como potente caldo. La pieza se elabora al vacío y en la salsa secreta con que se macera previamente para darle ese toque especial. Con la técnica al vacío consiguen controlar el tiempo y el punto de la carne y le dan una mayor jugosidad e intensidad de sabor. Además de la salsa secreta, tienes otras para terminarlo a tu gusto: curry, mojo o mole. ¿Patatas? Claro. Baby fritas o arrugás. Reserva el tuyo aquí. Es fundamentalmente delivery pero puedes llevártelo en Atocha, 107 si lo has reservado previamente. 

Publicidad

11. El Murciano

Un domingo sí y al otro también verás colas a la entrada de este asador de pollo. Un espacio humilde, barato y solvente. Y con solera. Llevan décadas en el negocio. A saber las aves que salen en ese característico recipiente de aluminio de este localito de Lavapiés (Valencia, 18). Rotundo éxito cada fin de semana. Para acompañar tienes desde fingers de pollo a una ensalada murciana además de las correspondientes patatas fritas y pimientos. Y de vez en cuando aparecen nuevos bocados para completar la comanda.  

  • Española
  • Moncloa-Aravaca
  • precio 1 de 4

Grande y ruidosa sidrería asturiana abierta desde 1888. Siempre es una buena oportunidad para codearse con madrileños pasando un buen rato en sus mesas de madera. El restaurante sólo sirve tres cosas: pollo, ensalada y sidra. Sé madrugador y llega antes de que empiece el hambre (alrededor de las 13.30h) si quieres conseguir sitio en la terraza o coge un pollo y sidra para llevar y haz un picnic a las orillas del Manzanares. Más tarde, espera colas.

Publicidad
  • A la brasa
  • Centro
  • precio 2 de 4

Una oda al pollo asado (y a las brasas). Con este siempre apetecible plato quieren conquistar a todo el que ande por los aledaños de Malasaña. El horno de Limbo, con un diseño que remite a un camión cisterna, está fabricado en hierro bruto con las tecnologías más punteras, que permiten optimizar sus funciones. "Al ser el eje central del local, su posición está muy estudiada para que todo lo que ocurre en el restaurante gire en torno a él, encuadrado entre dos grandes pilares de hormigón”, afirman desde Estudio Triscaideca, responsables del cuidadísimo interiorismo, un proyecto en el que llevan trabajando los últimos tres años. 

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad