Esta sesión está organizada por el colectivo el colectivo 'A_mal_gam_a' y se celebra en Republik, una de las salas más underground y con mejor sonido del centro de Madrid. Una cueva techno que celebra este ritual de baile siempre el segundo sábado de cada mes, creando una atmósfera electrónica muy adictiva frecuentada por clubbers iniciados en estas lides de la escena techno. Pinchan DJs muy dispares pero con la palabra 'underground' tatuada a fuego en sus sesiones. El techno sensual de Irazu, la electricidad de Geistform, los subidones de Pálida o el "expertise" de Roberto Groof ya han pasado por su cabina. Y otros tan vanguardistas como Alba Heidari, Kastil y Fractal 6.
Madrid fue en los años 90 una verdadera explosión en cuanto a clubbing se refiere. Era la época en la que los antiguos 'pinchadiscos', casi el último mono en los locales, se tornaron en estrellas e influencers analógicos. Todos querían ser DJs y alcanzar la fama y el dinero. Pero ese ‘boom’ se desvaneció en los años 2000 con la llegada de una etapa oscura en la noche madrileña, con cierres de salas y poca creatividad, que hizo que surgieran los llamados 'anti DJs', gente no profesional, totalmente punk y que se planteaba la noche de manera más frívola, sin tomarse nada en serio o de manera profesional.
En 2018, la cosa ha mejorado y se ha alcanzado un punto medio entre la vanguardia, el postureo y la mera diversión que ha vuelto a la noche gracias a la gente más joven, que ha fagocitado todo como un gran monstruo y ha creado sesiones de no-clubbing, como las de trap, reggaeton y ritmos latinos. Hoy en día todos los estilos conviven en armonía, hay espacio para clubbers 'viejóvenes' y las redes sociales han revolucionado el concepto de salir de noche. Hemos seleccionado algunos clubs para el mes de abril que bien merecen que movamos el esqueleto.