Chamberí, el barrio con el mejor café

Tal ha sido el éxito del Toma Café de Malasaña desde que abrieron hace apenas seis años que esta casa de cafés ha abierto una segunda sede en el barrio de Chamberí, junto a la siempre concurrida Plaza de Olavide. Hasta aquí han traído también el talento de sus baristas, expertos en preparar espressos, cappuccinos y moccas con un café de primerísima calidad (también de filtro). No en vano es considerado como uno de los mejores lugares de Madrid para disfrutar de una buena taza de café. Echad un vistazo a su carta para acompañar vuestra dosis de cafeína con una tostada de pan de semillas o un cruasán artesanal.

A locales como Toma Café 2 o Galileo 70 se suma este coqueto espacio abierto en uno de los señoriales edificios de la zona (con más de 130 años de antigüedad). Y acostumbrados a espacios reducidos y mini cafeterías donde sirven café de especialidad, en La Colectiva tienen un amplio salón en su planta baja, con cómodos sofás, diseño nórdico y, lo más importante, wifi. Su carta es completamente vegana (aunque tienen leche de vaca para el café) y sus tartas, bizcochos y tostadas de pan ecológico están para chuparse los dedos.

Como el vino o el gin-tonic, el café se ha convertido en la última bebida encumbrada a la categoría de delicatesen. Cada vez hay más cafeterías en Madrid que apuestan por un grano de calidad, con diferentes variedades y molido al instante. Y uno de los templos del café de Chamberí es Monkee Koffee, un espacio diáfano de paredes de ladrillo visto, mobiliario vintage y decoración industrial.

En la misma Glorieta de Quevedo se ubica este rincón para amantes del café de calidad. Se trata de un espacio donde el café es tratado con el mayor mimo posible por expertos baristas. Solo trabajan con productos de primera calidad y las últimas máquinas y filtros para extraer todo el sabor a cada grano, como la Brewer, Chemex o Aeropress. Controlan toda la cadena de valor del café, desde fincas propias en los países de origen donde se cultiva el café, el proceso de selección y tostado y su preparación.

Inspirado en la cultura cafetera australiana nace este pequeñísimo café en uno de los barrios gastronómicos más en auge de Madrid: Chamberí. Una estrecha barra y una mini mesa para dos al fondo es todo el espacio con el que contáis para probar el exquisito café que preparan aquí. Pero no os agobéis, también lo podéis pedir para llevar. Es casi uno de los únicos sitios de Madrid donde probar el ‘bulletproof’, un café muy de moda en sitios como San Francisco que incluye mantequilla y aceite de coco. Podéis acompañar vuestro espresso, latte o capuccino con su repostería casera (tienen unos muffins de frambuesa y chocolate blanco que están buenísimos) y tienen además una pequeña selección de platos salados como ensaladas y quiches.

Si en Barcelona ya eran toda una referencia en lo que a panadería artesanal se refiere, no es de extrañar la buena acogida que tuvo su desembarco en Madrid. Tanto es así que ya cuentan con varios bonitos locales repartidos por la ciudad. Y suman y siguen. Lo mejor de probar sus productos, ya sea bollería, repostería o panes, es que puedes ver cómo se elaboran en su obrador a la vista y se basan en el método tradicional francés. Su café es de muy buena calidad también, probadlo.

Si entras en The Toast Café querrás quedarte durante horas. La acogedora decoración de este pequeño bar-restaurante en pleno barrio de Chamberí te conquistará al instante. Y su comida de estilo americano acabará de enamorarte. En su carta encontrarás sándwiches artesanales, hamburguesas gourmets, desayunos americanos y brunchs, ensaladas, burritos y tacos y unos deliciosos postres caseros perfectos para acompañar de uno de sus cafés bien cargados.