Castillo de Requesens (Cantallops)
El castillo de Requesens ha visto de todo: aquí se celebró la despedida de soltero de Pierre Casiraghi -según el guía había incluso una máquina de 'vending' de pollos al ast- y una secta llamada Hijos de la Luna causó un incendio la noche de Navidad de 1990, cuando intentó dar lumbre a la chimenea del salón principal, que hacía un siglo largo que no se encendía.
Y claro, se rodó aquella infamia llamada 'El caballero del dragón' (de Colomo, Fernando), con Bosé haciendo de extraterrestre desorientado y Kinski y Keitel paseando arriba y abajo con cara del Fary chupando limones. La edificación es laberíntica y gigantesca: está documentada desde finales del s. X (cuando los condes de Empúries y Rosselló se lo disputaban) y lo que veréis es la reconstrucción de 1899 que hicieron los condes de Peralada, que le hicieron el lifting para que fuera su residencia de verano. La visita guiada vale su tiempo en oro.