Tarde día 1: entre Mogoda y Santiga
La primera tarde vallesana la pasaremos en Santa Perpètua de Mogoda, y comenzaremos nuestros pasos en la colonia agrícola de Mogoda, en el sureste del núcleo urbano, el barrio más antiguo y nacido al abrigo de una masía fortificada del siglo XII. El barrio está formado por una cincuentena de casas dispuestas en dos calles, la nueva y la vieja. En la masía fortificada se hacen visitas en contadas ocasiones, pero os contamos que se trata de una fortificación de tres plantas con patio central, un estanque y una capilla del siglo XVI.
Podéis dirigiros a continuación al otro vecindario más antiguo, el de Santiga, que hoy conserva el mismo aspecto que en el siglo XIX, cuando se agregó a Santa Perpètua. Su centro está formado por una iglesia románica del siglo XII, el castillo -una masía fortificada de los siglos X-XI y declarado Bien Cultural de Interés Nacional- y un lavadero.
La gran industrialización del municipio no llegó hasta la década de los 60 del siglo pasado. Aún así alguna industria ya estaba desde hacía tiempo, como el Vapor Arañó, de 1857, a partir del cual comenzó la urbanización de la llanura que hay entre la iglesia, la Rambla y la avenida de Santiga. El edificio, hoy propiedad municipal, es un notable ejemplo de patrimonio arquitectónico industrial, y una de sus naves se utiliza como centro cívico. Buscad también en vuestra visita a Santa Perpètua algunos de los 17 caseríos que aún hay en el término, entre los cuales Ca n'Oller, una clásica masía catalana, en manos de la misma familia de agricultores desde hace 700 años.