Tarde día 1: El primer castillo
Sólo llegar a la comarca, subimos al castillo de Subirats. Un mirador excelente para hacernos una idea de lo que nos rodea y de las muchas viñas que acoge el municipio de Subirats.
Del castillo cabe destacar que se tienen referencias del mismo del año 917, siendo así la primera construcción de estas características en la comarca. La torre maestra o del homenaje se muestra orgullosa al visitante marcando el punto más alto del edificio. Reconstruido parcialmente -el castillo sufrió su mayor destrucción en el siglo XVII, durante la guerra de los Segadors-, en el interior encontraremos algunas sorpresas, como una piedra de la Vía Augusta de unos 2.000 años de antigüedad que fue reconvertida en un sarcófago. Está en la llamada Sala del Miliario. En el museo del mismo castillo, inaugurado hace cuatro años, hay otros interesantes elementos, como monedas, antiguas campanas, o las camillas que se utilizaron durante cientos de años para transportar a los difuntos de las masías dispersas por el camino del Ordal hasta la iglesia de San Pedro de Subirats.
Esta antigua iglesia de San Pedro es, desde el año 1726, el santuario de la Virgen de la Fontsanta, y queda en un plano inferior de la fortaleza. También es muy interesante entrar. La planta es de una sola nave, con capillas laterales y un ábside semicircular medio excavado en la roca.