Tarde día 1: Las 'Pourd' y los corderos de la Ginebreda
Proponemos comenzar la escapada dirigiéndonos a Castellterçol, donde en las afueras, dirección Moià, encontramos el Mas La Ginebreda. Se dedican al cultivo extensivo de especies forrajeras y también a la ganadería, con 250 ovejas de raza ripollesa. Toda la producción, tanto la agraria como la ganadera, la están transformando en ecológica. Es posible visitar la finca y poder tocar los corderitos. Asimismo, desde el lugar os podréis acercar a los pozos de hielo, las 'Poues', que datan de los siglos XVII y XVIII. Adosadas y de gran tamaño, singulares en todo el arco mediterráneo, demuestran la importancia que tuvo el lugar en el negocio del hielo preindustrial. Jugaban a su favor, claro está, el clima frío del invierno en este punto y la proximidad a Barcelona. La rehabilitación reciente de una de las 'poues' permite al visitante entrar en su interior.