Los mejores puntos desde donde seguir la Marató de Barcelona

El MNAC no abre hasta las 10 pero si a las 8.30 h quieres  ver como un rey cómo arranca la carrera,  te pedimos un pequeño esfuerzo. Levántate temprano y sube las escaleras –las mecánicas si es necesario...– hasta llegar a los pies del Museu Nacional d’Art de Catalunya. Desde allí verás toda Barcelona, ​​nuestras queridas fuentes, las cuatro columnas y... la línea de salida llena de corredores. Estamos en el km 0, a ellos les quedan más de 42, vosotros podéis tomar el sol, correr por Montjuïc, leer y a las 10 h entrar a descubrir la colección del MNAC. Hasta las 10.40 h no está prevista la llegada del más rápido!

¿Quieres verlos ya en acción? Acércate hasta esta pastelería de barrio de toda la vida. En plena calle de Sants, la Kessler Galimany es una de las más antiguas y emblemáticas de la zona con 64 años de historia. Abren a las siete de la mañana y cuentan con una cafetería donde sentarse a probar pasteles, bocadillos o tomarse una buena taza de chocolate caliente mientras, muy cerca, los corredores comienzan su camino hasta el kilómetro 42,195.

¿Quieres despertarte del todo? La cara de sueño se te pasará de golpe al oír el primero de los ritmos que marquen los de Baketomba. Son un grupo de percusión que están situados en el primero de los cerca de 50 puntos de animación que habrá repartidos por todo el circuito de la carrera. Los Baketomba son un grupo de Molins de Rei que harán que te muevas al son de música. Si te cruzas con ellos, cuidado, están dispuestos a hacerte bailar y saltar. Si te quedas con ganas de más percusión, en el km 7,5 y el 8,3 estarán los Batubaroa y los Rompeolas. Arístides Maillol / Cardenal Reig. Entre 8.45 y 10 h.

¿Presumes de tu amor por la historia y la cultura? Pues cuídalo como es debido y acércate a conocer los bailes más tradicionales de nuestro país. La Colla de Bastoners de Esplugues nació con el objetivo de promover la cultura popular y en especial, el 'ball de bastons'. El domingo, mientras los corredores avanzan, ellos ofrecerán un recital al lado de Francesc Macià que vale la pena ver. ¡Todo para vivir la maratón de una manera diferente! Francesc Macià / Josep Tarradellas. 8.45-10 h.

Son unos de los jardines con más encanto de Barcelona. ¡No bromeamos! Si ya has dejado atrás la época universitaria recupérala por unas horas y aprovecha para relajarte mientras paseas por estos jardines que a menudo se convierten en un oasis en pleno centro de Barcelona. Si sacas un poco la cabeza, por la Gran Vía, verás pasar una hilera de corredores dejándose la piel camino del kilómetro 15.

Siempre es un buen momento para subir a la azotea de la Pedrera. Las chimeneas, las salidas de escaleras y las torres de ventilación, con sus formas y diseños, crean un auténtico jardín de esculturas al aire libre. No te despistes mucho y mira hacia el Passeig de Gràcia porque por allí subirán paso a paso los maratonianos. Si quieres vivir una experiencia similar pisando terreno Gaudí, en el Km 16 puedes hacerlo entrando en la Sagrada Familia y subiendo a una de sus torres.

¿Se os ha abierto el apetito? ¡Normal! Aunque lo veas desde la barrera, ¡esto del running da hambre! Si te acercas hasta este punto de animación podrás disfrutar de una degustación en la calle a cargo del restaurante Cargol Graciós. El olorcito del sofrito se nota desde lejos. La cosa va de caracoles pero solo en el estómago, porque en el asfalto todo son liebres. Rosselló / Passeig de Sant Joan, 9-11 h

Después de bailar al ritmo de la mejor percusión, de moverse haciendo bailes de bastones y de comer a gusto, llega el turno de escuchar buena música y cantar intentando no desafinar demasiado. En la Meridiana os encontraréis con las canciones del grupo AESE. Elegante y sutil, su pop-rock moderno coquetea con la música electrónica y con los ritmos afro-latinos. Además, en el escenario no estarán solos, lo hacen junto a cuatro bailarinas en una mezcla de música, baile y teatro. Avinguda Meridiana / Antillas