Deporte en el Eixample izquierdo

Si sois de los que reniegan de la curiosa estructura de La Arenas, bañaos en la piscina del Club Metropolitan (Gran Vía de las Cortes Catalanas, 373) que se ubica en la última planta del centro comercial y os enamoraréis del espacio para siempre. Tiene unas vistas espectaculares a toda la ciudad de Barcelona. Además, si sois groupies del running, aquí encontraréis dos carriles como los de una pista de atletismo que rodean el centro comercial y que os servirán para hacer series. Y si queréis más, encontraréis 700 horas mensuales de actividades dirigidas y ... ¡con tiendas justo al lado!

¡Atención que aquí tenemos una piscina olímpica! Son 10 carriles. Sí, ¡10! Una barbaridad así que si buscáis un buen lugar para nadar o perfeccionar vuestra técnica, en la de Sant Jordi (París, 114) son especialistas en pulir vuestra brazada. Ah, y la cosa no termina ahí. Cuando os sequéis y dejéis en el vestuario el bañador, también tienen para vosotros una sala de fitness, de cardio, de spinning y de actividades dirigidas.

¡Un oasis de tranquilidad y deporte en medio del Eixample! ¡Gracias! El Eurofitness Sant Miquel (Muntaner, 166) es un club moderno pero a la vez cercano y de toda la vida. La piscina es de 25 m que no está nada mal porque es como la mitad de una olímpica y tiene 6 carriles. Además, aparte de no faltar clásicos como las clases de spinning o el body pump también tienen un buen número de sesiones virtuales en horas menos habituales para dar servicio a los que vamos con horarios extraños.

Un campo de fútbol, ​​una sala polideportiva y una pista exterior de cemento para jugar a fútbol sala, balonmano, voleibol o baloncesto. Y, todo muy céntrico y en plena ciudad. ¿Lo mejor? Que está en la Escuela Industrial (Viladomat, 262). Parte de los edificios acogieron la fábrica textil Can Batlló y pese a la renovación que ha sufrido, todavía conserva un aire industrial que le da mucho encanto. Esta instalación está gestionada también por la Piscina Sant Jordi.

¡Hombres abstenerse! Dona 10 (Córcega, 107) es un centro exclusivamente femenino, así que si sois de aquellas mujeres que os sentís más cómodas entrenando sin hombres cerca, aquí haréis diana. Encontraréis clases de pilates 'tierra', en máquina (reformer), sesiones de yoga y servicios de belleza. Además, como buen centro enfocado a la mujer también cuentan con clases específicas para embarazadas y post-parto.

¡Eh! Desde hace poco, el Joan Miró (Diputación, 17) tienen una pista de paddle indoor. Hay muy poquitas en Barcelona, ​​así que poca broma. Además, ofrecen cerca de 200 actividades dirigidas y, lo mejor, tienen sesiones exclusivas para juniors, es decir, que los jóvenes de entre 14 y 18 años podrán hacer pump, bici, coreografías y balance a su ritmo. ¡Y no son los únicos! Para los mayores de 65 hay aquagym y estiramientos.

Estamos ante un clásico gimnasio de barrio. El Centre d’Esports IPSI (Provenza, 97) es acogedor, familiar y práctico. De aquellos donde en recepción incluso te saludan por tu nombre. Cuenta con una piscina cubierta de 4 carriles, una sala de fitness con máquinas de trabajo cardiovascular, una polivalente para las clases dirigidas y una pista polideportiva. Además, también son un club perfecto para llevar a los pequeños: con escuela de iniciación deportiva y sección de baloncesto, gimnasia artística, judo, hockey sala y natación.

Aquí también encontraréis el trato familiar típico de un gimnasio de barrio y unos precios más ajustados pero si entráis os explicarán que también se dedican a preparar al que quiera para la alta competición en Taekwondo, Karate, Full Combat o Culturismo. De hecho, en el Gimnàs Atenea (Rosselló, 102) tienen grupos de pequeños y mayores especializados en artes marciales, así que si os interesa eso de aprender a dar patadas y puñetazos... ¡id de cabeza!

Es un DiR. Vamos, que si alguna vez habéis pisado un gimnasio de esta cadena que inunda Barcelona ya sabréis que en sus gimnasios encontraréis de todo. En el DiR Tarragona (Tarragona, 108-110), sin embargo, se debe destacar sí o sí una sala de fitness de más de 700 m2 ideal para que no sufráis por las aglomeraciones y podáis hacer Zumba dejándoos la piel. Ah y algo más. En la zona de aguas, os sentiréis como en otro mundo y, en parte, gracias a la luz ultravioleta.

¿Su objetivo? Ayudaros a bajar el nivel de estrés, a relajaros, a respirar y a ejercitaros siendo conscientes de vuestro cuerpo. En Shunia Yoga (Av. Mistral, 10. Entlo, 9) son especialistas en Kundalini, conocido también como el yoga de la conciencia. Mantiene el cuerpo en forma y entrena la mente para ser fuerte y flexible. Se trabaja en un espacio amplio, tranquilo y completamente blanco y, aparte de Kundalini, también ofrecen sesiones de Hatha Yoga -el clásico- o de Shakti dance -un yoga donde se trabaja a través del movimiento-. Ei, y al final de las clases, quizás tenéis suerte y podéis tomar un Yogi Tea con galletas ahí mismo.

Uno de los epicentros del ambiente barcelonés, el Hotel Axel (Aribau, 33), se define a sí mismo como 'heterofriendly' y no nos podía fallar. Su gimnasio también es amigo de los barceloneses. Encontramos un spa y un circuito de aguas termales a la altura de los mejores de la ciudad con baño de vapor, sauna seca y cascadas de agua. Pero antes demostrad que os merecéis un descanso en su sala de fitness con máquinas de última generación. Si entre flexión y flexión queréis conocer gente, apuntaos al TotalCross33, grupos de entrenamiento reducido donde sudar en compañía.

¡Squash! ¡Squash! ¡Squash! Por si no os había quedado claro todavía, os diremos que el Esportiu Rocafort (Floridablanca, 41) es uno de los mejores lugares de Barcelona donde jugar a squash. Tienen 7 pistas y cuentan con una escuela infantil, organizan cursos de iniciación y perfeccionamiento, ligas sociales... ¡De todo! Ahora, si lo que queréis son clases dirigidas de fitness, sala de máquinas y piscina aquí también lo encontraréis, ¡no sufráis!

Si os queda cerca el parque de Joan Miró estáis de suerte porque las mañanas del lunes os podéis acercar a hacer tai chi y chi kung y los miércoles ejercicios de memoria y paseos. Y todo de forma gratuita. Las gimnasias orientales proponen una serie de ejercicios suaves donde se combina respiración, concentración y movimientos para aprender a conectarse con uno mismo. Los paseos son de unos 30 minutos con calentamiento previo. El punto de encuentro está a 50 metros del bar del parque y, aunque en origen está pensado para mayores de 40 años, todo el mundo es bienvenido.