La birra artesana fluye sin freno en La Més Petita, una cervecería que no necesita metros cuadrados para ofrecer algunas de las mejores cervezas. Con 8 tiradores y una terraza más grande que el local, el maestro cervecero Albert Sanchis y creador de la cerveza Almogàver os tirará la caña con un amor insuperable. Para hacer cojín, platitos con quesos ingleses.
Fueron unos de los primeros y todavía son referencia. Cerca de Correos encontraréis La Cerveteca, bar, tienda y también lugar de cursos, degustaciones y maridajes. Aquí podréis probar casi tantas cervezas como países hay en el mundo. Si después de un rato no vais demasiado bebidos, podéis entreteneros mirando etiquetas. Como en el mundo del vino, cada vez hay más curiosas. Y sí, aquella pareja de barbudos que ves en una botella son Zztop. A los maestros cerveceros también les gusta el rock duro.
De los creadores de Rosses i Torrades, la tienda de cervezas artesanas de Consell de Cent, hace poco nació La Resistència, un local enorme para probar algunas de las mejores cervezas internacionales. Presumen de tener 12 tiradores de donde no para de salir birra fresca y cada semana cambian de marcas, las procedencias y los estilos.
Aunque el nombre de este local nos invite a saltar, en realidad, nos descubre el secreto de la birra artesana. Si Ale es cerveza y hop significa lúpulo, en Alehop son unos expertos. Pueden presumir de un montón de tiradores de donde salen cervezas exquisitas, pero sobre todo de una lista de platos vegetarianos que dejan K.O. a cualquier competidor. Hacen poco que han empezado a preparar brunches los fines de semana.
Si la combinación de cerveza y chiringuito es irresistible, una vez hayáis dejado el mar atrás y todavía tengáis restos de arena entre los dedos, os podéis acercar hasta La Cervecita. Muy cerca de Selva de Mar, encontraréis en este bar y tienda cinco surtidores para perder el norte y muchas botellas para llevaros a casa. Entre la bebida de categoría hay cervezas catalanas y de importación.
Todo el mundo conoce el Estraperlo aunque no haya ido nunca. Es el bar de la serie ‘Pop Ràpid’, y si sois mitómanos, podéis ir a Badalona para tocar con vuestras manos la sala de ensayo de Els Frederics, pero lo mejor del local son las rubias (birras). Pocas salas de concierto pueden presumir de tiradores de cerveza artesana. Sólo el Estraperlo puede marcar paquete.
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