Este no es un hotel burbuja normal y corriente. Qué va. Su diseño es elegante, el interiorismo está cargado de detalles y es capaz de generar una atmósfera tan sofisticada alrededor que te lleva de viaje a algún lugar lejano. Creo que con esto ya he contado lo suficiente como para saber que no, este no es solo una burbuja. En realidad tiene truco, porque se se trata de todo un complejo hotelero que combina habitaciones translúcidas con un alojamiento de suites al más puro estilo boutique, con piscina exterior y hasta un apetecible cenador acristalado con vistas al pinar. Y (por si alguien lo está pensando ya nada más ver las fotos) no, no está en Finlandia.
Se llama Noctis, es un hotel solo para adultos y está a medio camino entre un alojamiento glamping, casa rural y hotel boutique. Un apetecible lugar de diseño escondido en Soria y que combina un alojamiento que fusiona "arquitectura elegante y naturaleza que lo rodea" según sus propietarios. Es casi como un refugio de alta montaña, con un interiorismo muy 'hygge' y acogedor (muebles de madera de colores suaves y muy nórdicos, textiles anturales, ratán y mucha rafia, flores secas y preservadas...). Este complejo se levanta en una antigua finca del siglo XX rústica y muy romántica, rodeada de jardines y hasta con una pequeña ermita (el lugar es ideal para organizar una boda).
¿Dónde está este nuevo y singular hotel burbuja de diseño?
Noctis se encuentra en las inmediaciones del pico de San Marcos (a solo cinco kilómetros de Soria) y cuenta con diferentes espacios: la casa grande, una villa con capacidad para hasta 12 personas y un cenador con vistas al bosque de pinos; el paraíso de burbujas: son dos, cada una con capacidad para dos personas (una con piscina infinity privada, y la otra con dos bañeras exteriores para disfrutar a cielo abierto); y luego están las suites, 14 habitaciones localizadas a dos alturas (las que parecen levantarse entre las ramas de los árboles, y las que están bajo las rocas). Un lugar donde parece que la tranquilidad es puro diseño, y viceversa. La finca, además, tiene hasta una piscina exterior creada de tal manera que te lleva de viaje hasta una época de palacios y casonas (con ese toque de decadencia que tanto gusta).