1. Dormir bajo las estrellas
¿Quién quiere intimidad pudiendo dormir bajo un manto de estrellas? Súmale a eso el estar literalmente rodeado de naturaleza y la experiencia será ya de traca. Lo mejor de todo es que no es una hipótesis, algo futurible, sino lo que ofrece este Airbnb de la Sierra de Madrid. A modo de domo, siguiendo la tendencia del glamping tan de moda en los últimos años, este alojamiento cuenta con cama de matrimonio, baño completo y hasta un pequeño sofá. También con un nivel de silencio y tranquilidad que solo se explica si se entiende que esta cabaña está situada en las afueras de Soto del Real.