Madrid tiene una gran tradición de marroquinería y recuperar ese pasado con un toque de diseño es el germen de esta marca de bolsos, que acaba de abrir su primera tienda física. Habituales hasta ahora de los mercados de moda de la capital, Carlos y Roberto, los creadores, dan un paso más allá en este nuevo espacio.
Sus diseños juegan con las formas, los colores y los materiales de origen nacional. Por ejemplo, su creación estrella -y la que representa su estilo- es el modelo Ori, que combina piel de vacuno de curtido vegetal, herrajes tradicionales en los cierres y detalles y madera de haya sostenible sin tratar en el asa. Un bolso elaborado de forma artesanal desde su taller en Lavapiés, con varias posiciones para llevarlo, muy ligero “y al alcance de la mayoría de los bolsillos”, nos explica Roberto.
Esta creación ha sido el punto de partida de otros modelos, desde versiones en diferentes tamaños a riñoneras y también propuestas como mochilas unisex donde se une algodón y cuero, una línea de ante, billeteras, monederos y hasta diseños de rafia para el verano. Con tantas opciones (y tan bonitas), habrá que elegir una para cada momento y sin perder de vista lo próximo, que será con piel reciclada de restos de la industria del calzado y la moda.