Las mejores calles de Madrid para ir de rebajas en enero

Alejada del epicentro del turisteo y el ambiente nocturno de la calle Huertas, ofrece otra visión del barrio de Las Letras, donde se dan encuentro jóvenes diseñadores y firmas de artesanía. Destacan, por ejemplo, La Compañía Polar, que se declaran antigentleman y apasionados por los grandes iconos de la tradición sport masculina; Alphaville, donde encontrar tesoros de moda vintage; Wilde Sunglasses, el paraíso de las gafas de segunda mano; o The Veintinueve Madrid, que revive el estilo pinup en sus colecciones. Algo más de moda y cosas bonitas es lo que se puede encontrar en La Intrusa y AdHoc Flores. Y para los que buscan algo gastro, nada mejor que Casa González, donde hacerse con productos made in Spain.

¿A qué huele Madrid? Gracias a calles como esta, a flores frescas y perfumes de autor que son pura envidia de quien no los tiene. Entre las floristerías molonas, Margarita se llama mi amor o Cacto Cacto. Imposible no fijarse en ellas ni en los ramos que engalanan sus escaparates, trepando desde el suelo a la fachada. Y en perfumerías, Le Labo, el templo de los perfumes de autor con estética neoyorquina y alma frandesa. Además, en esta calle se concentra un buen puñado de tiendas de ropa para chicas con un toque retro y naïf como Compañía Fantástica, mientras que las marcas urbanas de tendnecia están en LAB by LaMarca. Por cierto, si el hambre aprieta, lo mejor es entrar en La Duquesita (Fernando VI, 2) o pasar por la pastelería francesa Maison Kayser. Hacedlo y sabréis por qué. 

Todo el barrio de Chueca es un hervidero de tiendas y comercios de rabiosa actualidad. Pero si hay que decantarse por una única calle, prueba con Pelayo. Desde la plaza de Chueca hasta Fernando VI concentra auténticos templos para cuidarse: Blow Dry Bar es un salón de belleza donde pasar la tarde -prueba sus tés y sus bizcochos mientras te haces un corte de pelo-, o Con Calma, la boutique de los cosméticos orgánicos para el cuidado personal. Dos ateliers de la belleza que se codean con lugares como La Oficial, el templo de la cerámica artesana; González & González, que nos invita a viajar al pasado entre escobas naturales, cepillos de madera y jabones artesanos; Aunty B. India, donde hacer un pequeño viaje al país a través de ropa de hogar y vestidos; Ángel Studio, que te sumerge en un mundo de decoración con mucha personalidad; o Am.lul, marca de moda sostenible y la primera tienda a pie de calle de la influencer Gala González. 

Epicentro del barrio de las Salesas, se ubica entre la calle Alcalá y el Paseo de Recoletos, y ha conseguido reunir un buen ramillete de tiendas selectas, tanto que ya se ha ganado el sobrenombre del nuevo 'Soho' madrileño. El Árbol Shop es una de las que más ha contribuido a ello, un local multimarca con ropa para él y para ella, similar a Scocht & Soda. También destaca Mott, elegante y sencilla, con cierto aire afrancesado. Y la boutique de Ragtime Work&Shop, que ha traído hasta el centro de la capital su ropa y complementos de aire étnico. Algo más informal y de aire veraniego, pero de verano en la Costa Azul, es lo que puedes encontrar en Ancla de Mar. Aunque si se trata de viajar, en la tienda Gion encontrarás un pedacito de Japón, ya sea a través de ropa japonesa vintage o las originales creaciones de sus propietarios. A pesar de tanta tienda de ropa no vas a poder resistirte a entrar en Taschen, la librería de la conocida editorial de libros. Por cierto, destaca también una tienda muy curiosa: Macchinine, local especializado en juguetes antiguos y coches a escala. 

Es una de las preferidas para ir de compras por el centro. Todo lo que busques, lo puedes encontrar en esta calle, desde calzado con tiendas como Pompeii; cosmética con marcas de filosofía orgánica como Lush; ropa deportiva, complementos, lencería made in USA, hasta bombones y chocolates, marcas españolas emergentes como Blue Banana y otras 'made in Madrid' de prestigio internacional recién llegadas al barrio, como We Are Knitters. Date una vuelta y mira todo lo nuevo que esconde en el tramo comprendido entre Gran Vía y la glorieta de Bilbao.

Cualquier momento del día es bueno para deslizarse por esta calle de tramos alargados y empinados que vertebra el barrio de Malasaña. Si quieres saber qué es lo que se cuece en Madrid en cuestiones de moda, diseño y complementos, date una vuelta por esta travesía que va desde la calle Fuencarral hasta Gran Vía dividida en dos tramos -Corredera Alta de San Pablo y Corredera Baja de San Pablo-, siendo la plaza de San Ildefonso el nexo de unión. Aquí se dan cita desde tiendas de diseño como la concept store de rabiosísima actualidad como El Moderno, de ropa vintage como Amores Eternos, donde encontrar hasta joyitas de los años 40; La Antigua, con su ropa y complementos con mucha personalidad; Lady Cacahuete, de aire rockabilly; Animal Baby, con ropa moderna para bebés o Freak & Face y García Madrid, donde se visten los gentleman más modernos de Madrid.

Si te gusta la ropa vintage y encontrar joyas tan antiguas como actuales entre montones de ropa usada y de segunda mano, esta calle te va a encantar. Aquí se concentra un buen puñado de tiendas especializadas en ese tipo de ropa y complementos de esencia vintage que ha conseguido encandilar a la mismísima Sarah Jessica Parker durante una visita a Madrid en la que descubrió los vestidos de época años 20 de Williamsburg y otras joyitas traídas desde Nueva York. Muy cerca está Magpie, otra veterana del barrio especializada en ropa de segunda mano, la Mona Checa, donde van más allá incorporando a su catálogo incluso objetos antiguos y el Rincón de la Tía Jo.

Aunque es una calle de renombre y se asocia con las compras prohibitivas del barrio de Salamanca, por aquí se pueden encontrar tiendas y boutiques para todos los bolsillos. Sin ir más lejos es en esta calle donde está la 'flagship' de Uniqlo (con permiso de su nueva tienda en Gran Vía) y la sede de Ikea. Otro espacio para la moda, aunque hay que tirar un poco de tarjeta, es Lola Casademunt, y si buscas opciones sostenibles, Suela será tu tienda preferida. Además de poder hacer compras en cadenas de cosmética muy reconocidas, también hay hueco para joyas en Marketplace New York y hasta para saciar el apetito en Un bizcocho para Teo.

Seas madrileño o visitante, esta histórica calle es de necesaria visita. Incluso aunque vivas más alejado del centro, pasear por ella es como vivir más Madrid. Arranca en la confluencia con la calle Alcalá y termina en la plaza de España y aquí se puede encontrar de todo para comprar, comer y hasta salir. Pero en cuestión de 'shopping', el mundo Inditex es el rey. Todas sus firmas tienen presencia a un lado y otro de la calle, incluida la tienda de Zara más grande del mundo (en los bajos del edificio que preside la plaza de España y que en sus plantas superiores alberga el hotel Riu). No faltan las opciones de lujo -como las joyas de Grassy-, las tiendas para los aficionados a cualquiera de los dos equipos madrileños, el Real Madrid o el Atlético, o de accesorios como la tienda de las maletas de Salvador Bachiller que, por cierto, oculta un secreto: un café repleto de vegetación como si fuera un oasis en medio de la ciudad. Se llama el Invernadero y es perfecto para hacer una pausa entre compra y compra.