Curro Carmona era un trapero que montó esta tienda hace muchos años en el castizo Rastro. Un local del que en los 90s se nutrió toda la escena de clubbing, que compraba allí la ropa o varias marcas vintage de la cultura de club que pillaban todo y ponían su etiqueta para intentar ser Michael Alig, incluso editoriales de moda de revistas tipo Vanidad o Neo2 vistieron a sus modelos con el vintage de esta tienda haciéndolo pasar como tendencia. Recuerda a aquellos vetustos almacenes de los 60 y 70 regentados por traperos y ropavejeros. Podemos encontrar verdaderas joyas de ropa de los 70, 80 y 90 y telas de todo tipo a precios muy bajos. Es un must del estilismo madrileño y una de las tiendas más modernas, a pesar de parecer una trapería. Bueno, no lo parece, lo es.
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