Si en tu último viaje a Japón o Corea te encaprichaste de los bizcochitos Chocopie o las galletitas de Shin Chan, puedes encontrarlos aquí. Be-Kndy es una de las últimas tiendas asiáticas en llegar a la ciudad para acercar la cultura asiática comestible a los madrileños, con un pequeño local en el barrio de Conde Duque que más que una tienda supone un viajazo por las calles de Osaca, Seúl o Shanghai. Caprichos dulces y salados, desde golosinas icónicas y galletas conocidas por el universo manga, a platos famosísimos de la cultura street food en versión instantánea. Hablamos de ramen, gyozas o noddles, de salsas de judía o de soja, picantes o dulces, algas crujientes...
En el apartado snack, otro mundo: helados, mochis, bizcochos, tartaletas, chocolatinas (como los Kit Kat de sabores o los Pepero, la marca del 'mikado' coreano). En las neveras, montones de refrescos (los más famosos son los Ramune, con etiquetas coleccionables de Dragon Ball), aguas de sabores, tés o incluso yogures para beber. Eso en la zona de productos envasados, porque hay otra en la que se pueden comprar chuches al peso como en cualquier tienda de golosinas, solo que estas mezclan sabores picantes con dulces, salados y ácidos. Cuidado con llenar la bolsa sin saber, porque la sorpresa siempre está garantizada.
Lo mejor es preguntar a Rocío, su propietaria, fanática de este tipo de golosinas como buena hija de coreana que es. Durante su infancia pasaba largas temporadas con su abuela, y cada vez que volvía a España había demasiadas cosas que echaba de menos. Por eso, al terminar sus estudios de grado (en 2022) lo vio claro: tenía que montar una tienda para vender aquí todos esos productos que solo se pueden encontrar en Corea y Japón. Y así nace este gran escaparate para adictos a los caprichos asiáticos.