Renovarse a morir. Esta máxima aplicable a todos los aspectos de la vida lo es también al mundo de la gastronomía. Y eso lo que debieron pensar los responsables de los restaurantes La Vaca Argentina, que han dado un cambio de 180 grados a sus establecimientos sin perder su pilar fundamental: la carne de primera calidad. Desde el nombre y la decoración, más moderna y cálida, con maderas y baldosas vintage, hasta incorporar una nueva zona de barra donde comer a cualquier hora (con menú de mediodía entre semana), tomar unas cañas, unos vinos por copas o hasta unos cócteles, o incluso lo más importante de una cadena de este prestigio: la carta.
Y para la difícil tarea de actualizarla sin perder sus platos más demandados han elegido a Javi Estévez como director gastronómico. Una decisión que se aprecia nada más empezar a leer la nueva carta, con platos como las mollejas de ternera a la parrilla o un steak tartar servido en un hueso con su tuétano, una pequeña oda a la casquería reinventada que Estévez maneja a la perfección en su propio local, La Tasquería. Entrantes más ligeros y una sección de guisos tradicionales completan una oferta donde la carne sigue siendo la protagonista. No dejéis de pedir su chuletón para dos personas con patatas y ensalada. Y si os queda sitio para el postre, disfrutad de sus refrescantes natillas de mango o su tarta fina de manzana, una versión más ligera que pone el broche perfecto a una comida de 10.