Las experiencias gastro (y la nueva terraza) de The Principal que os encantará descubrir este otoño

La joya de la corona de The Principal está situada en su sexta planta. Ático luce unos amplios ventanales por los que entra a raudales el sol de otoño. Un rincón tranquilo en pleno centro donde degustar recetas tradicionales y buen producto nacional y que estrena, además, nuevos platos en su carta de temporada. Apuntad, porque hay unos cuantos para no perderse: sus empanadillas de cocido junto a la reducción del propio caldo; su tortilla vaga, perfecta para compartir y que combina gamba de cristal y butifarra; su bacalao a baja temperatura con pilpil y asadillo de pimientos; sus albóndigas de rabo de toro con puré de patata de Robuchon; o su canelón de pollo asado y setas, ¡un imprescindible! Y para terminar, joyas como su torrija caramelizada con helado de vainilla y violeta. Simplemente inolvidable. 

La experiencia gastro también pasa por relajarse, mirar al horizonte y disfrutar de los días de sol que regala el otoño. Por eso, en esta nueva temporada The Principal estrena terraza, La Pérgola, situada en la misma planta que Ático y perfecta para tomarse un cóctel espectacular después de la comida o para aprovechar una tarde entre sabrosas tapas -no olvidéis probar la ensaladilla, el cochifrito de Segovia o sus espectaculares burgers- y cócteles de diseño inspirados en Madrid y firmados por el mixólogo Daniel Cruz. Un montón de veladas inspiradoras os esperan en esta preciosa terraza asomada a la Gran Vía. 

Visitar The Principal siempre es sinónimo de buen trato, elegancia y tranquilidad desde el momento de la llegada: si decidís hacerlo en coche, podéis disfrutar de su parking gratuito y su servicio de aparcacoches. Subid directamente hasta la sexta planta, donde encontraréis una mesa en ambiente discreto, con mantel blanco y una carta que combina la cocina exquisita con el amor por el buen hacer patrio; de hecho, podéis reservar una de las áreas como espacio privado para comidas o cenas premium en las que necesitéis intimidad. Es vuestro momento: asomaos a Ático y La Pérgola y descubrid por qué Madrid se vive de forma especialmente deliciosa en sus alturas.