¿Qué ha sido lo más duro o difícil en todos estos años?
A- Estos años han tenido cosas duras, pero somos tan afortunados de poder hacer todos los días lo que nos apasiona, que no seríamos capaces de decirte una cosa que cambiaríamos.
I- Seguramente todo lo que sacrificas en el camino, que principalmente son cuestiones personales. También frustra el inmovilismo de la Administración en relación a licencias y permisos. Es un tema que desgasta mucho.
¿Os deja todo esto algo de tiempo libre? ¿Qué os gusta hacer en cuanto tenéis un hueco?
I- Sí. Pero ese poco tiempo lo gastamos en comer y beber.
A- Lo disfrutamos viajando, haciendo surf, saliendo a cenar...
Lo que empezó en Arzábal ahora es mucho más grande… Personal, proveedores, clientes… Ahora mismo, ¿en qué se ocupáis más tiempo diariamente?
I- La gestión de personas es en lo que estamos más centrados.
A- Sí. Ocupamos la mayor parte del tiempo en la organización interna. Es un trabajo nuevo para nosotros pero igual de bonito y gratificante.
Después de Club A, ¿el cuerpo os pedía algo más desenfadado, más informal y nació Lovnis?
I- El cuerpo nos pide rock&roll, somos inquietos, emprendedores… Surgen ideas y tenemos la suerte de poder desarrollarlas. Con Lovnis conseguimos tener cubierto casi todo el espectro y casi todos los rangos económicos.
A- Lovnis era un proyecto que llevaba tiempo rondando por nuestras cabezas y hasta que no lo hemos logrado no hemos parado.
I- Siempre nos pareció una idea fresca y divertida.
En restauración la mejor recompensa siempre es…
A- Que el cliente repita.
I- Al final la recompensa te la tienes que poner tú. En mi caso es la satisfacción de hacer lo que nos gusta y hacer pasar buenos ratos a la gente. El agradecimiento sincero de alguien anónimo es siempre muy grato.
Si Arzábal lo definís como taberna/barra/mesas/vinos. ¿Qué cuatro palabras definirían Club A y cuáles servirían para Lovnis?
I y A- Restaurante/Japo/Champagne/Cocktail para Club A y Lovnis… Platos combinados/bar/recuerdos/raciones.
Entre los tres locales puede moverse uno andando. ¿Es una decisión meditada que se encuentren tan cerca? ¿Facilita la gestión?
I- Lo cierto es que la disponibilidad de los locales en Madrid y sus condiciones marcan mucho su situación. Casi te eligen ellos a ti. Para el caso de Lovnis nos gustaban también otros barrios, pero es complicado encontrar locales que se adecuen a las necesidades de los conceptos ya definidos. Sin duda, nos facilita la gestión en el caso de Arzábal y Club A. A Lovnis, aunque queda cerca, no vas en una carrera, pero es muy divertido andar de un lado a otro.
Sois, imagino, fanáticos de la zona
I- Nos encanta sí. Ya nos gustaba de clientes y cada vez nos parece más interesante. Aglutina un montón de opciones de calidad.
¿Está entre vuestros planes abrir fuera de Madrid?
I y A- No está en nuestra hoja de ruta, en nuestros planes inmediatos, pero no cerramos puertas a nuevos proyectos. Seguiremos creciendo y sería fantástico poder hacer algo internacional.
Y terminamos con un test urgente…
Iván Morales:
Tu plato preferido: Huevos fritos con chistorra
Un viaje gastronómico pendiente: Perú
Un vino para este verano: Rich, lo nuevo de Veuve Clicquot
Para tomar y relajaros con un buen cóctel vas a… Macera
Un restaurante madrileño para darse un homenaje: Sacha
Álvaro Castellanos:
Tu plato preferido: Cocochas al pil pil
Un viaje gastronómico pendiente… Japón
Un vino para este verano: Ruinart Blanc de blancs
Para tomar y relajaros con un buen cóctel vas a… Del Diego
Un restaurante madrileño para darse un homenaje: Zalacaín