Con una oferta gastronómica de lo más completa a lo largo de diferentes espacios, este restaurante de la calle Velázquez consigue adaptarse a todos los paladares, bolsillos y horarios y se ha convertido ya en el ‘meeting point’ del barrio de Salamanca porque aporta a la zona ese punto asequible y desenfadado pero a la vez atractivo que tanto necesitaba.
Cocina cosmopolita con productos de alta calidad, precios para casi todos los bolsillos y la posibilidad de comer a cualquier hora del día. Dingo se sale de los cliclés para llevar a rajatabla el concepto ‘all day dinning‘ con una gran variedad de platos que se pueden pedir desde la mañana hasta la medianoche. Desayunos, brunch diario, aperitivo con cervezas artesanas y copas y cócteles hasta la madrugada. Y en la carta, hamburguesas singulares, una interesante selección de huevos (los Benedictine pochados con beicon y los Rotos con paletila ibérica son imprescindibles), carnes de primera calidad cocinadas al grill y ensaladas para los paladares ‘healthy’.
Prueba la burger Café de París, de ternera con queso brie, cebolla pochada, hojas de espinaca y su propia versión de la mítica salsa que da nombre a la hamburguesa, creada en los años 30 del siglo pasado. Y para los más clásicos, un plato de puchero que varía cada día.