La Cabaña Marconi es un oasis acristalado en medio de Alcobendas. Alejarse del centro merece la pena para tomarse una tosta de gambas del mercado de Estocolmo, una burrata tartufata o un gazpacho de temporada.
Esta carta tan variada tiene su origen en las experiencias vitales de su dueño, Marcos Olazábal, que ha incorporado desde las recetas suecas de su madre a platos de Italia o propios de la cultura culinaria española. Un auténtico jardín lleno de encanto para escapar de la ruidosa ciudad.