Hay quien no lo sabe, pero esta es una de las tradiciones más arraigadas en las fiestas de Carnaval de Madrid. De hecho, es una de las escenas inmortalizadas por el genial pintor Francisco de Goya en una de sus obras.
Como su propio nombre indica, el evento consiste precisamente en mantear un muñeco que suele representar a algún personaje que, por un motivo u otro, se merezca ser manteado mientras el resto canta canciones burlonas. Un plan perfecto para que se diviertan todos los públicos.