Café del Rey
Solo les falta el rayo verde, ese esquivo fenómeno óptico en el horizonte playero al atardecer. Porque mojitos, daiquiris, sangrías (o hasta el cóctel Pride si te pilla celebrando el Orgullo) se despachan, entre palmeras y cañas de bambú, con la celeridad que marcan las temperaturas y el hilo musical. Y tú ya estás frotando la arena con los pies mientras das otro mordisco al bao tropical.
¿Dónde?: Paseo del Rey, 22.