1. Piscina-Club Stella
Visible desde la M-30, a escasos metros de la calle Arturo Soria, la Piscina-Club Stella fue construida en 1947 en un estilo racionalista tardío. Una de las construcciones más singulares de la vanguardia arquitectónica madrileña del momento que vivió sus años dorados como símbolo del lento aperturismo frente a la estricta moral franquista. En 2006, echó el cierre definitivamente, lo que ha derivado en un progresivo deterioro que le ha llevado a convertirse en uno de esos edificios abandonados de Madrid, a pesar de estar protegida por un plan especial desde 2011.