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Sí, todos andamos detrás de una terraza. Y más los fines de semana. Y más ahora que, salvo la ola de frío que se avecina para estos días, empiezan a subir las temperaturas. Para hacerse con una mesa en la que acaban de abrir los chicos de TriCiclo junto a los responsables de The Hat debéis que andar rápidos. Levantaron la persiana de Villa Verbena hace apenas tres semanas y si buscáis hueco en sábados y domingos tenéis que reservar con una semana de antelación aproximadamente. La ubicación es privilegiada. Y al sol se está tan a gusto... También podréis ir a probar suerte porque tienen varias mesas altas para el picoteo más informal, sin mantel, para las cañas y unas croquetas o una ensaladilla.
Quienes ya conozcáis sus proyectos (TriCiclo, Taberna La Elisa, Sua), sabéis que comer bien en esta nueva casa, aunque sigan en el tiempo de rodaje, está asegurado. La carta comprime parte platos bien reconocibles (salmorejo, txistorra, terrina de foie, alcachofas, pochas, callos) pero siempre está más que atenta al mercado. Lo que entre y sea atractivo, estará en sus mesas. Pueden ser unos rapitos, unos berberechos, un rodaballo... Porque, además de lanzar una propuesta que se adecua a todos los gustos (sí, los de los niños también), la parrilla tiene un lugar especial. Carne con el sello de calidad de Discarlux, lubina salvaje, pulpo, molleja... Bocados que pasan por las brasas y que resultan ineludibles.
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