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Mercadillo de artesanía y mercaderes, pasacalles, cuentacuentos, animaciones teatralizadas, danzas medievales, tiro con arco, torneo de justas a caballo, combates entre caballeros, viandas y dulces del pasado, hasta una pintura mural sorpresa... y la reina Isabel la Católica recorriendo el camino hacia su coronación como en 1474. En apenas unos días, una de las ciudades más bonitas de España (declarada Patrimonio de la Humanidad) vuelve atrás en el tiempo organizando una recreación histórica sin precedentes para conmemorar el nombramiento de la que es una de las españolas más influyentes en el mundo de la historia universal, y considerada "una mujer excepcional y una reina excelente", en palabras del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Durante tres días, 4, 5 y 6 de octubre, esta ciudad se va a volcar en un acontecimiento único y singular, para "celebrar con entusiasmo, imaginación y alegría" este hito histórico que sitúa a Segovia, a solo una hora de Madrid, en el centro de todas las miradas. No es para menos, porque a la fiesta no va a faltar ni la propia Isabel I la Católica, interpretada por la actriz María Castro. Y, como sucedió hace ahora 550 años, Isabel estará arropada por un cortejo a la altura de las circunstancias, formado por una comitiva de más de 250 personas, perfectamente vestidas para la ocasión con trajes y vestidos de época (muchos salidos del taller de Carmen Andueza).
Los lugares más bonitos de Segovia
El trayecto pasará por los lugares más emblemáticos de la ciudad, imitando aquel trayecto que hizo la propia Isabel cuando apenas contaba con 23 años: desde la plaza del Azoguejo, como punto de partida principal, y bajo la atenta mirada del imponente acueducto de Segovia, hasta la plaza Mayor, la catedral, y el Alcázar. Y es que la ciudad de Segovia fue testigo del alzamiento de la mujer que sentó las bases del estado moderno, difundiendo la lengua castellana y patrocinando el descubrimiento de América con su apoyo a Cristóbal Colón, entre otros grandes acontecimientos de la historia que hoy, más de cinco siglos después, siguen estando de actualidad. Y son un motivo ideal para hacer una escapada antes de que llegue de otoño.