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A la zona noble también ha llegado la nueva ola de la pasta fresca italiana. A un pasito de uno de los mejores bares de vinos de Madrid, Vinology, se ha instalado la que es ya la nueva reina de la pasta fresca y hecha a diario en la capital. Se llama María Fraile y viene de Maison Kayser, todo un referente de panadería-repostería a nivel mundial y con casi una decena de tiendas repartidas por la ciudad. Así que hay currículum (era la directora de calidad y producción) y buenos vecinos para animar la calle. Primer paso para triunfar.
![Passsta bar](https://media.timeout.com/images/106193570/image.jpg)
El gran éxito en este nicho italiano, centrado en comer barato, rico y con un importante peso en el delivery/take away, sigue siendo Beata Pasta (cuenta ya con dos locales siempre llenos: en Princesa/Plaza España y Glorieta de Bilbao) pero atención a este Passsta bar (Zurbano, 13) que no va a ser flor de un día. "No somos un restaurante, somos un bar de pastas", apuntan en sus redes sociales. Es vuestro sitio, oficinistas del barrio. Comer y marchar.
Acaban de estrenar su primer local, un espacio pequeño, sencillo y marcados colores monocromos, con media docena de mesitas metálicas (y alguna más a pie de calle para los días soleados que queden de otoño) donde tomar la pasta y la salsa que elijas si es que quieres elegir hacer tu propio combo. Si no quieres liarte, tienen combinaciones espléndidas donde ambas elaboraciones encajan a la perfección. Abren de lunes a domingo desde las 12.00 hasta las 23:00 horas.
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Caserecci, cornetti, macheroni, fusilli sin gluten... y un puñado de salsas (clásicas pero hechas en casa: pomodoro, pesto, boloñesa, trufada...) es la base a la que puedes sumar una ensalada por delante o un brownie (aunque quizás esperabas un tiramisú pero aún está al caer) por detrás. Tu feliz ración de carbohidratos diaria la tienes ahora más cerca (trabajan con Uber Eats) de casa o la oficina. Y sabes que caerá un día u otro porque es uno de los productos más consumidos de nuestra querida cocina mediterránea. De hecho, puedes comprar bolsas de pasta (250 gramos) para hacértela en casa a tu gusto.