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Cuando en verano sube el termómetro en la gran ciudad hay ciertas horas, especialmente entre las 15 y las 17 horas, en las que se hace imposible poner un pie en la calle. Las altas temperaturas y la intensidad del sol dificultan el poder transitar por el centro para hacer cualquier actividad de ocio. Pero este verano el Ayuntamiento de Madrid quiere que la vida en la ciudad ofrezca tanto a madrileños y madrileñas como a visitantes la ocasión de seguir disfrutando de la cultura aún en los días que sufrimos las altas temperaturas, ¿cómo? Convirtiendo los espacios culturales en refugios contra el calor.
Según desveló elmundo.es y ha confirmado después la delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, el Consistorio está trabajando en un programa para los meses de julio y agosto con actividades especiales en museos, bibliotecas y espacios culturales municipales, entre otros.
Así, por ejemplo, habrá descuentos para ir al cine en esa franja horaria de más calor, actividades gratuitas en las bibliotecas y también instituciones culturales como el Museo Reina Sofía, el Museo del Prado y el Museo Thyssen, la Galería de las Colecciones Reales o CentroCentro, ofrecerán una variada oferta cultural, como espectáculos, actuaciones musicales, etc. De esta manera, el público podrá hacer actividades al aire libre durante la mañana o a partir del atardecer y refugiarse en los espacios culturales en las horas centrales del día. Todavía habrá que esperar para conocer más detalles sobre esta nueva iniciativa.
Círculo de Bellas Artes, refugio climático
En línea con la idea de crear durante el verano un espacio que sirva como refugio contra el calor, el Círculo de Bellas Artes abrirá su sala de baile gratis a todo el público en julio y agosto. Un espacio donde estar, pero sobre todo un espacio donde se podrán conocer las propuestas que trabajan en pro de un futuro sostenible, generar alianzas, intercambio social y promover la reflexión, y especialmente la acción climática. Se llevarán a cabo talleres, conciertos, actividades familiares y performance y contará con una instalación vegetal bajo la cúpula y diferentes microespacios construidos con pupitres y mesas en desuso, muebles recuperados convertidos en mecedoras y hamacas hechas con lona publicitaria reciclada. E incluso habrá una guardería de plantas para quienes necesiten que alguien se las cuide durante sus vacaciones.