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Es, a buen seguro, el monumento más icónico de todo Madrid. Y como todo patrimonio arquitectónico, necesita de un lavado de cara de vez en cuando. La Puerta de Alcalá será restaurada íntegramente, tal y como ha avanzado el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida.
"Ha llegado el tiempo de cuidar nuestra Puerta de Alcalá, de restaurarla”, ha adelantado el primer edil, que confía en que las obras arranquen "antes de que acabe la legislatura”. En declaraciones a Telemadrid, el director general de Patrimonio Cultural, Luis Lafuente, explicó que es necesario "hacer una rehabilitación integral especialmente en los elementos ornamentales, que son de piedra caliza, un poquito mas blanda que el granito, que es la estructura”.
Pese a esa rehabilitación integral, los trabajos respetarán algunos aspectos históricos del monumento, como los agujeros de bala de la Guerra de Independencia (1808-1814) contra las tropas napoleónicas.
La Puerta de Alcalá se construyó entre 1769 y 1778 por orden de Carlos III, conocido como "el mejor alcalde de Madrid" debido a las numerosas actuaciones que llevó a cabo en la capital. El monumento conmemora su entrada en la ciudad como rey de España. Tras ella está el arquitecto italiano Francesco Sabatini, que ganó el concurso por encima de las propuestas de otros como Ventura Rodríguez o José de Hermosilla. En total, mide 20 metros de alto por 43 de ancho.