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La tortilla de patata, elaborada con huevos camperos y patata monalisa, sin gluten ni ingredientes artificiales, que lleva años sin rival en los lineales del supermercado para quienes buscan no liarse en la cocina (y lograr un resultado más que convincente para los invitados o uno mismo) y para la OCU, acaba de estrenar en el ecuador del verano, entre chiringuito y chiringuito, su versión más saludable. Primero fueron las croquetas pero, tras varios años de constante I+D, el cocinero Senén González ha logrado crear una versión perfecta para la airfryer.
La nueva tortilla para freidora de aire tiene dos años de caducidad en congelador (pero no te va a durar un mes ahí porque te resuelve fácilmente una cena), se hace en cuatro minutos y la venden en dos tamaños: el de 600 gramos y el individual de 200 gramos, que se encuentra en un pack doble indivisible. Ambos productos dan soluciones por igual a los empresarios del HORECA (Hoteles, Restaurantes y Cafeterías) y al consumidor final que lo tiene en los congeladores de muchas grandes superficies.
Si ya ha conquistado nuestro país, ahora el ambicioso chef vitoriano -"mi objetivo es lograr que la tortilla española se conozca en el mundo al igual que conocemos la pizza"- quiere triunfar en Estados Unidos. Y no se podía buscar mejor aliado para esta empresa. Bajo el sello José Andrés Foods sus emblemáticas tortillas llegarán a los hogares norteamericanos que echen de menos las que se comieron en su viaje por España y a los residentes españoles allí que no quieran batir seis huevos.