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Después del eco que tuvo un local para todos los bolsillos especializado en pasta fresca en Chamberí, llega otro italiano al barrio, muy cerca de la popular plaza Olavide, para conquistar el estómago de los más curiosos. La propuesta y el ticket medio son otros. Hay pasta fresca hecha a diario (tiene obrador en el mismo local y utilizan semola rimacinata y harina 00) pero su apuesta parte de ahí para ir más lejos. Como dicen ellos mismos, "a modo nostro".
Lejos también en la noche. Porque a la atractiva sección sólida se suma una carta de coctelería que anima el ambiente nocturno (de jueves a sábado) que se arremolina en su barra para calzarse su versión del Negroni o del Spritz. Apuntad su horario: de martes a sábado de 13.30 a 0.30 y los domingos desde las 13.30 y hasta las 18.00 horas. Ininterrumpido para el servicio de barra (no de cocina).
La cocina de Manifesto 13 (Hartzenbusch, 12), liderada por Simone Nebbia, se apoya con firmeza en su bodega, la otra columna vertebral de este proyecto. Vinos naturales, de baja intervención. Siguiendo la tendencia que crece. Casi medio centenar de etiquetas (blancos, tintos, espumosos) y una decena de opciones por copa que irán cambiando periódicamente.
Pero, vamos, a los platos. Son italianos pero no talibanes. Hay tiramisú, unos rigatoni a la genovesa y una panzanella de puerros, pimientos asados y fiore sardo pero no quieren ser adalides de la tradición. Están las raíces y los ingredientes pero quieren darle apuntes de autor, buscar el sabor que te conquiste, encontrar la diferencia respecto a otros compatriotas. Y así en carta aparece un plin de conejo con mantequilla artesanal, tomillo, olive taggiasche y piñones o los agnolotti de piña y parmigiano, mantequilla artesanal y salvia frita.
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