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El bocadillo está en todas partes. De Vietnam a Buenos Aires, de Estambul a Suecia. Algo entre pan y pan nos gusta a todos. No solo es lo más portátil que existe sino que resulta tan versátil como económico. Y puede ser tan callejero como doméstico. La gente de la guía Taste Atlas lo saben bien. Por eso han seleccionado los mejores bocadillos a lo largo del planeta echando mano de la información y opinión de usuarios de todo el mundo.
Y, aunque superado por el de jamón (ay, el jamón), es el bocata de calamares el segundo mejor valorado representando a España en una lista donde el podio lo ocupan Turquía (con el Tómbik, un tipo de döner kebab que usa un pan plano en forma de bollo), Perú y Argentina. En Madrid, aunque no lo inventáramos, abanderamos este bocata, que tiene en los alrededores de la Plaza Mayor algunos de los locales más famosos para probarlo aunque quizás sea El Brillante, junto a la estación de Atocha, la dirección más popular para hincarle el diente.
Al puesto 27 se aúpa nuestro querido bocadillo que tiene una nota de 4.3 que lo hace empatar con el sabich israelí, el cheesesteak estadounidense, la bifana portuguesa o el croque-monsieur galo. ¿Y dónde queda el de jamón? Pues en la decimosegunda posición.
