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La cumbre de lo castizo. Este legendario plato de Madrid tiene su propio día en el calendario semanal cuando no verdaderos especialistas en cocido y sus vuelcos. Cada restaurante pone el suyo. Lunes, jueves o, como aquí, cada miércoles. Un plato único que son varios. Una receta llevada a la excelencia por un chef con dos estrellas Michelin pero sin el precio que le ponen en el mítico Lhardy. De los 65 euros que cuesta en ese local centenario a los 45 euros (con bebida y postre) que te vas a gastar en un comedor de un hotel, ojo, de todo un 5 estrellas en el barrio de Salamanca.
Mario Sandoval (Coque, Coquetto...) se pone el traje de alta cocina popular como chef ejecutivo de Haroma. Este espacio del hotel Heritage (con sello Relais & Châteaux) se transforma en una afinadísima casa de comidas. No solo hay materia prima de primer nivel, venga de su propio huerto en el caso de las verduras o de afamados productores nacionales para los embutidos y las carnes, sino que los distintos vuelcos se sirven con menaje de plata (soperas, bandejas y cucharones) original del siglo XIX, un ajuar adquirido durante años en diversos anticuarios por la familia propietaria del hotel.
