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Halloween es, para muchos, solo una noche más, mientras que para otros la del 31 de octubre es la noche más terrorífica del año. Si sois de este segundo grupo, aquí va una lista con los castillos embrujados más interesantes que se pueden visitar en Europa, por si os apetece poner a prueba vuestro nivel de miedo en una escapada.
1. Inglaterra. La Torre de Londres, levantada junto al Támesis, es uno de los lugares de Inglaterra que más fantasmas tiene (según las leyendas). Construido en la época de Guillermo I, ha sido prisión, residencia de la realeza, armería y cámara del tesoro de las joyas de la corona. Y de entre todos sus espíritus, el más notable es el de Ana Bolena, la segunda esposa de Enrique VIII que fue decapitada en este lugar. Cuentan que, desde entonces, su fantasma sin cabeza se pasea por allí. Aunque no está solo: el rey Enrique VI, el príncipe Eduardo V y su hermano el duque de York...
2. Escocia. El Castillo de Edimburgo. El fantasma más famoso que habita en esta fortaleza, símbolo e icono del centro de la ciudad, es el espectro del gaitero solitario (The lone piper). ¿Y qué hace ahí? Cuenta la leyenda que entró obligado por las autoridades locales. Le enviaron para comprobar hasta dónde llegaban los pasadizos secretos descubiertos bajo el castillo, y que nunca más salió. Por lo que su alma sigue atrapada y hay quien afirma seguir escuchando el sonido de su gaita a modo de lamento.
3. Rumanía. El Castillo de Bran es mundialmente conocido como el Castillo de Drácula, y todo porque guarda un parecido más que razonable con el que Bram Stoker describe en su novela. Y aunque Vlad Tapes, el personaje de Drácula, nunca llegó a vivir en este castillo, la fortaleza se ha convertido en un auténtico imán para los amantes de las emociones fuertes. La cuarta planta está reservada solo a los valientes: allí les esperan las criaturas de la noche más populares de la mitología rumana, incluyendo fantasmas y hombres lobo.
4. Francia. Además de ser uno de los palacios más importantes y espectaculares del mundo, el Palacio de Versalles también es conocido por sus fantasmas. El de María Antonieta, junto a su corte, es el más famoso. Esta es su historia: tras ser guillotinada en la plaza de la Concordia, su fantasma se trasladó hasta Petit Trianon, un palacete edificado dentro de Versalles donde María Antonieta se alojó en vida. Además de haberla visto, algunos visitantes aseguran haber experimentado sonidos tétricos acompañados de luces y destellos.
5. Portugal. El Palacio Nacional de Mafra, espectacular conjunto arquitectónico (con palacio, convento y basílica), es el monumento barroco más importante de Portugal. Y como todo gran edificio, rodeado de mitos y leyendas, también tiene sus propios fantasmas: los suyos son los espíritus de los trabajadores que perdieron la vida durante su construcción del mismo. Una leyenda a veces opacada por otra mucho más curiosa: la presencia de enormes ratas mutantes en los túneles del palacio.
6. Eslovenia. Conocido por ser el castillo de cueva más grande del mundo, el Castillo de Predjama es también la morada de Eramos de Predjama, el famoso caballero que resistió durante un año el asedio de las tropas del imperio austríaco en este lugar prácticamente inexpugnable (una pared de roca a más de 120 metros de altura). Cuenta la leyenda que fue derrotado porque uno de sus criados lo traicionó, y desde entonces, su fantasma ronda el castillo en busca de venganza.
7. España. La residencia de los duques de Alba en Madrid, el Palacio de Liria, es una de las casas privadas más extraordinarias de la capital y un museo abierto al público desde hace relativamente poco tiempo. Entre sus bienes más preciados (además de las obras de El Greco y Goya, y una imponente colección de joyas en su interior) se encuentra el fantasma de la emperatriz Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III, que falleció en el palacio a los 94 años por un ataque de uremia.
8. Italia. Situado en la Plaza de la Señoría, el Palazzo Vecchio es uno de los principales lugares de interés en Florencia y antigua residencia de la familia Médici. Además de obras de incalculable valor artístico, parece ser que desde 1441 el palacio cuenta con un invitado de honor: el fantasma de Baldaccio d'Anghiari. Un valiente guerrero que, víctima de una traición, fue asesinado en una de las estancias del palacio. Tras arrojar su cuerpo por la ventana, el cadáver fue decapitado en la Plaza de la Señoría y, desde entonces, su espíritu ronda las salas del Palazzo Vecchio esperando que se haga justicia.
9. Países Bajos. A muy poca distancia de Ámsterdam, la belleza del Castillo de Muiderslot es tal que parece sacado de un cuento de hadas. Pero esta preciosa fortaleza medieval también tiene su lado oscuro: cuenta la leyenda que el fantasma del conde Floris V, quien ordenó la construcción de Muiderslot a finales del siglo XIII, sigue merodeando por el castillo. Al parecer, fue capturado y encarcelado por sus amigos durante una cacería para después acabar con su vida en las proximidades del castillo. Quienes quieran descubrir el lado más macabro del castillo, pueden hacerlo durante las visitas nocturnas que tienen lugar el fin de semana de Halloween.