El Rosewood Villa Magna es el primer hotel que la cadena de lujo internacional Rosewood Hotels & Resorts (con sede en Hong Kong) abre en España, un privilegio que sitúa a Madrid en el mapa de las ciudades con los mejores hoteles cinco estrellas. Se encuentra en el antiguo hotel Villa Magna, un edificio reformado íntegramente y (re)abierto en 2021 bajo el exclusivo sello Rosewood, aunque sin perder su esencia palaciega, que para eso se levantó en 1972 en el mismo lugar en el que estuvo el Palacio de Anglada (construido en 1876). Se han recuperado hasta los jardines palaciegos, rediseñados por el paisajista y arquitecto Gregorio Marañón.
Y no le falta ingredientes para ser uno de los referentes del turismo de lujo de la capital: 154 habitaciones con un marcado estilo sofisticado (en los textiles y mobiliario, con baños de mármol y amenities de Maison Caulieres) pero actual, muy alejado de los cánones clásicos del diseño. Mucho más parecido a una residencia palaciega que a un hotel; no hay más que echar un vistazo a sus cuatro Signatures Suites, las joyas de la corona del Rosewood Villa Magna, entre las que destacan Anglada House, la suite más amplia del hotel. Un ático situado en la última planta en el que se disfruta de la más absoluta privacidad y de unas dimensiones de vivienda de lujo (sala de estar con chimenea, sauna, gimnasio privado, vestidor y terraza abierta con impresionantes vistas de la capital).
Y como buen hotel de lujo, no puede faltar ni su zona dedicada al welness y el bienestar (spa Sense, que incluye hasta un hamman turco), ni su restaurante gastronómico: en este caso el sello lo pone Amós, que llega Madrid desde el Cenador de Amos en Cantabria con sus tres estrellas Michelin. El hotel cuenta con tres espacios gastronómicos más: Las Brasas de Castellana, Tarde.O (espíritu de club inglés) y Flor y Nata, un rincón dedicado a la alta pastelería.