Este es el primer hotel Four Seasons de Madrid. Abierto junto a la puerta del Sol, en la plaza de Canalejas, su sola presencia ha convertido la zona (puerta de entrada al barrio de Las Letras) en la nueva Milla de Oro de la capital, atrayendo a los bolsillos más adinerados y a los curiosos con ganas de ver qué sucede dentro de uno de los hoteles más lujosos de la capital. Porque dormir en una de sus 200 suites puede costar entre 700 y 2.000 euros la noche; lo de la Suite Real (antiguo despacho de Mario Conde) ya es otro nivel: el coste asciende a más de 20.000 euros. Pero como sucede en la hotelería de calidad, no todo pasa por domir. Cuenta con el spa más grande de Madrid, un gastrobar con aire clandestino y asiático (Isa) y el restaurante Dani Brasserie (de Dani García) en su magnífica azotea. En los pasillos, mucho arte, que para eso oculta una autçentica galería expositiva con más de 1.500 piezas repartidas por todo el hotel, desde zonas comunes a privadas. Y por suerte para todos (huéspedes y no alojados), la más interesante está en el lobby: un Companion de 2,5 metros de alto, la única escultura de gran tamaño de Kaws en Madrid.
Aunque si por algo más destaca el Four Seasons Madrid es por ser también la sede de Galería Canalejas, el centro de 'shopping' y gastronómico más interesante de la ciudad. Ir de compras puede ser solo para pudientes (tiendas como Cartier, Hermès y Louis Vuittón), no sucede lo mismo con la zona gastro, un Food Hall para todos los bolsillos (desde 15 a 300 euros), con 4.000 metros cuadrados y 13 espacios gastronómicos (desde los arrones de St. James y Monchis, a Salvaje o Le Petit Dim Sum).