Castizo, za: 1. adj. De buen origen y casta. 2. adj. Típico, genuino del país o del lugar en cuestión. 3. adj. Dicho del lenguaje: Puro y sin mezcla de voces ni giros extraños.
Cualquiera de las tres acepciones de la palabra "castizo" le va como anillo al dedo a Cervezas La Virgen. Una marca que ya se ha convertido en una de las señas de identidad de Madrid, y que es venerada como pocas por los amantes de la Cerveza Pura y hecha con cariño y sin prisas.
Hoy, y de la mano de Cervezas La Virgen, os proponemos un recorrido por alguno de los locales en los que se puede degustar, además de sus distintas variedades, una cocina auténticamente castiza. Bares de los que presumir con propuestas gastronómicas tan únicas como 100% de aquí.
Desde hace ocho años, Verbena Bar (Velarde, 24) forma parte del imaginario malasañero por excelencia. Su “kistch castizo” combina platos de toda la vida con un ambiente moderno y juerguista. Vermut de grifo, gildas, cervezas La Virgen...
Y para clásicos, uno de sus hits: el mejor bocata de calamares de 'Madriz'. Que no lo dicen ellos: lo dicen a menudo sus clientes y la crítica. ¡'Pa' madrileños, ellos!
Un local de referencia para el tapeo y las cañas en pleno corazón de Malasaña. El Circo de las Tapas (Corredera Baja de San Pablo, 21), cuyo nombre viene del tiempo que su fundador estuvo viviendo en uno de ellos en San Francisco, llegó a este rincón de Malasaña cuando era más famosa por su mala vida que por sus restaurantes y teatros. Hoy la calle es un lugar de obligado paso para saber lo que sucedía en el centro de la ciudad.
¿La recomendación? No te vayas sin probar las papas con Mojo y acompáñalas de un doble de Jamonera. Y si te apetece dulce, no te pierdas la Tarta Tatín.
A sólo un pie de la Gran Vía, en el número 4 de la Corredera Baja de San Pablo, se encuentra Malpica, el sitio perfecto para disfrutar de un tapeo 100% madrileño en un ambiente insuperable y siempre animado. Si vais a Malpica, grave error sería no tomarse unos torreznos con una buena Lager de La Virgen y unos tacos de cochinita pibil con una IPA de botella.
Tras muchos días de curro, birras, tortillas y torreznos en el corazón de Malasaña, el Grupo Bamboleo (del que también forman parte el Circo de las Tapas y Malpica) aterrizó hace tres años en Legazpi, junto al Matadero. Su magnífica terraza en el número 2 de la plaza de Rutilio Gacís, su carta castiza, su comida casera y su ambiente de barrio convierten a Toboggan en un sitio único para dejar que las horas pasen entre tapas y buenas birras. ¿Nuestra recomendación? Una Lager o una Jamonera con su famoso Pepito Palentino (en honor al que servían en el mítico Bar de la calle Pez), con filetes de ternera, queso brie y pimientos verdes asados.
Hay pocos barrios más castizos en Madrid que Chamberí. Allí, en la calle Galileo, 66, Amelia y Fran abrieron en 2019 El Mono, un lugar en el que plasmar todo aquello que siempre quisieron encontrarse allá por donde han ido de tapeo. El local está pensado para compartir ratos inolvidables, desde su iluminación interior hasta su agradable terraza. Lo que veis en la foto es uno de sus platos estrella: Wok de secreto ibérico con patata agria, verduras salteadas y salsa kimchi, acompañado, claro está, de una buena Lager de barril de La Virgen.
En el número 88 de la calle San Bernardo, haciendo esquina con Manuela Malasaña, se encuentra La Tape, un local pionero en el barrio especializado en cerveza artesanal. Una amplia oferta que combina con una gastronomía de temporada, con toda una serie de platos a cada cual más apetecible. Os recomendamos probar el brioche de tinta de calamar con chipirones fritos, sobrasada y alioli cítrico, acompañado de una Virgen Lager sin gluten para limpiar el paladar y por qué no, ayudaros a probar más cosillas de la carta. Por ejemplo, la ensaladilla rusa o algún plato de su sección de parrilla de carbón (una burger, una picaña, puerros con romesco...) ¡Que no paren las tapas!