1. La ruta cultural: del Monasterio a Marilyn
El Monasterio de Sant Cugat del Vallés es una de las joyas más valiosas del arte medieval de los antiguos condados de Barcelona. No tiene la antigüedad del monasterio de Poblet, pero es mucho más impresionante que cualquier otra construcción religiosa del período románico que podamos encontrar en cualquier otra localidad de Barcelona. El Monasterio –el más poderoso del Condado de Barcelona– está conservado de manera impecable, tiene uno de los claustros más amplios y serenos de toda la arquitectura religiosa medieval, y el interior se puede visitar de manera regular, incluida la iglesia y el campanario y también a través de visitas teatralizadas familiares cada primer sábado de mes a las 12.00 horas, y por la noche, también organizan las veladas musicales de verano en el Claustro: dos opciones diferentes para conocer de forma diferente un monumento muy preciado por los santcugatenses. Aunque subir al campanario no es sencillo para todo el mundo, una vez arriba las vistas son magníficas, ya que permite observar Collserola a vista de pájaro, y además vislumbrar en la lejanía las cumbres ariscas de Montserrat. Una vez visitado el Monasterio, el otro gran atractivo cultural de Sant Cugat es el Museo Marilyn, que está situado en la Casa Museo Cal Gerrer, en la plaza Octavia –que previamente habrás localizado desde el campanario, ya que está cerca–. Actualmente, y hasta el 9 de septiembre, se puede visitar una exposición dedicada a Marilyn Monroe: imágenes, objetos personales y memorabilia diversa para comprender mejor uno de los mitos pop del siglo XX.