Tarde día 1: una muestra única de arte paleocristiano
Nada más llegar a tierras tarraconenses os proponemos visitar la Villa Romana de Centcelles, a seis kilómetros de la capital, gestionada por el Museo Nacional Arqueológico de Tarragona y declarada Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO. Recomendamos hacer una visita guiada para no perderse detalle de este conjunto, una muestra única de arte paleocristiano, la más antigua del mundo romano que se conserva. Si viajáis con niños, aún con más motivo podréis elegir acercaros a Centcelles, ya que en la Villa se desarrollan actividades expresamente dirigidas a los pequeños, desde talleres hasta la narración de un cómic presentado en forma de mosaico.
La visita puede convertirse en un excelente preludio para escaparse a cenar a Tarragona, con docenas de restaurantes que ofrecen platos con los ingredientes de la cocina Mediterránea y en un entorno arquitectónico singular.