Escapada a la Anoia: desde bajo tierra al espacio

Mitad dedicado a la meteorología, mitad a la astronomía, el Observatorio de Pujalt es un espacio único y donde, si vais cuando el cielo está despejado, podréis conocer los aparatos usados ​​en estas ramas científicas, y si entráis cuando está oscuro, podréis observar a través del telescopio los astros y estrellas que nos rodean. Se inauguró hace poco más de una década, y en todos estos años en el centro se han hecho también charlas, talleres y cursos. Una visita que no se pueden perder ni los interesados en los fenómenos meteorológicos, ni los que quieren saber cosas de más allá de nuestro planeta azul.

Seguimos en Pujals en este segundo día en la Anoia. Y lo hacemos para visitar un lugar muy diferente del que vimos ayer. El Memorial del Ejército Popular es un sitio que nos permite mantener viva la memoria y recordar qué significan las guerras. Partiendo de un completo Centro de Interpretación, el Memorial incluye también la entrada a un refugio antiaéreo y una ruta señalizada y museizada por una zona de bosque que fue campo de entrenamiento del ejército republicano en el transcurso de la guerra civil española. Unos espacios y unos elementos que quizás nos pueden impresionar, pero que es bueno conocer para no olvidar y, quizás también, como homenaje a aquellos que lucharon, y en muchos casos perdieron la vida, en defensa de unas libertades y de unos ideales.

Después de comer sí dejamos atrás Pujals y lo hacemos para ir a conocer el Centro de Restauración e Interpretación Paleontológica (CREP) que se encuentra en Hostalets de Pierola. Y es que en este municipio está Can Mata, uno de los yacimientos paleontológicos más importantes a nivel mundial por los restos recuperados de primates. Es por este motivo que nació el CRIP, que según sus responsables "tiene como misión principal la puesta en valor y la divulgación de la extraordinaria riqueza e importancia paleontológica de los yacimientos del Mioceno existentes en el municipio". Los contenidos que encontraréis giran alrededor de cuatro ejes temáticos: paleoprimatología, paleopaisaje y fauna del Mioceno, excavación paleontológica, y finalmente restauración y conservación de material fósil. Lo más adecuado es que hagáis la visita guiada para que os puedan explicar el por qué de la importancia del yacimiento de Can Mata y os den la información más relevante sobre los tiempos del origen de los hominoides. Se llevan a cabo los sábados a las 12 h y a las 17.30 h y los domingos a las 12 h, o también se puede concertar visita en el teléfono 664 043 755.

Capellades llenará las horas de nuestro último día en la comarca. Veremos cosas muy diferentes. Por la mañana iremos a un antiguo molino papelero del siglo XVIII y que hoy acoge uno de los museos sobre el papel más completos que hay en todo el continente. El motivo por el que encontramos este museo aquí es claro: Capellades y sus entornos fueron, en los siglos XVIII y XIX, un importantísimo núcleo de producción papelera, especialmente de papel de barba y de papel de fumar. El Museo Molino Papelero de Capellades conserva un fondo formado por herramientas, maquinaria para la fabricación del papel tradicional, carátulas, tampones de madera, papeles y documentos que van desde el siglo XII hasta la actualidad... A la elegancia del edificio –blanco, de cuatro plantas y con muchas ventanas y ventanillas, algunas de las cuales servían para que pasara corriente de aire y así se secara el papel– se suma, en el exterior, la presencia de la Balsa, una fuente natural de donde brota un caudal de 12 millones de litros diarios, usados en su momento como energía para el funcionamiento de los 16 molinos papeleros que llegaron a trabajar en esta zona.

Hecha la visita, y como complemento de ésta, es una idea excelente comer en alguno de los restaurantes que ofrecen en su carta el arroz papelero, una receta recuperada hace pocos años y estrechamente ligada al trabajo en los molinos papeleros de estas tierras.

Si en los Hostalets hay un yacimiento importante, ¡en Capellades no se quedan atrás! En el Parque Prehistórico de Capellades se han encontrado una veintena de yacimientos arqueológicos de diversas épocas, desde el paleolítico medio hasta la edad media. Dicen los entendidos que el que tiene más importancia científica –y que se puede visitar– es el llamado Abric Romaní, correspondiente al paleolítico neandertal. Se descubrió en 1983, y hoy siguen los trabajos de excavación bajo la dirección del conocido Eudald Carbonell. A toda la riqueza arqueológica hay que sumar también la riqueza natural del lugar, con la Cinglera del Capelló como protagonista. Las visitas guiadas –se hacen a lo largo del año, pero si es un grupo de más de 15 personas se puede reservar una cuando mejor vaya– duran alrededor de una hora, e incluyen incluso un taller de tiro con propulsor y de tiro con arco.

Hemos viajado al pasado en varias ocasiones a lo largo de esta escapada, y también al cielo. Desgraciadamente, todo se acaba y ya va siendo hora de volver al presente real.